Plan para Iniesta

Es imprescindible y básico. Andrés Iniesta tiene este rol en los planes de Luis Enrique en lo que resta de temporada y, en especial, durante el intenso mes de abril. El manchego debe estar al cien por cien en las grandes citas y éste es el motivo por el que descansa en encuentros en el que la exigencia no es a priori tan elevada, como ocurrió el domingo en Granada.

Luis Enrique y su staff tienen perfectamente planificados y elegidos los partidos que Andrés debe afrontar con frescura. El primero es del de mañana miércoles ante el Sevilla en el Camp Nou. El Barça se mide al cuarto clasificado de la Liga, que no pasa por su mejor momento, pero el entrenador barcelonista tiene en muy alta consideración a los de Jorge Sampaoli y el centrocampista debe estar en el campo.

Tras este partido, la idea en estos momentos es que Andrés vuelva a descansar en Málaga –probablemente se siente en el banquillo como en Granda por si debe salir como solución de urgencia- y afronte en la mejor condición el duelo ante la Juventus del próximo martes 11 de abril en Turín.

Un clásico a cara o cruz

Al cabo de cuatro días se presenta la Real Sociedad en el Camp Nou en un duelo que se espera menos comprometido que en meses anteriores cuando el cuadro ‘txuri-urdin’ estaba lanzado. Un partido en el que las rotaciones estarán al orden del día con la vuelta de la eliminatoria de cuartos de final de la Champions frente a los juventinos el miércoles siguiente en el Estadi.

Tras este partido, el planning de Luis Enrique pasa por la titularidad de nuevo de Iniesta en el clásico del 23 de abril en el Santiago Bernabéu. Todo apunta a que será un encuentro absolutamente trascendente para el desenlace liguero y el mejor centrocampista del equipo debe estar en la sala de máquinas.

La Champions marcará el camino

Por tanto, en la serie de los próximos seis encuentros, Luis Enrique necesita imperiosamente a Iniesta en cuatro de ellos y tiene previsto darle descanso en los dos ligueros frente al Málaga y Real Sociedad.

A partir de entonces, la planificación irá muy vinculada al hipotético pase del Barça a las semifinales de la Champions que se disputan el 2/3 de mayo, la ida y el 9-10 de mayo, la vuelta.

Antes de la semifinal, el Barça tendría dos partidos de Liga, uno el miércoles 26 de abril frente a Osasuna en el Camp Nou y otro el 30 de abril en Cornellà contra el Espanyol. La Champions determinaría entonces los minutos que tendrían los futbolistas, aunque parece evidente que solo habría rotación frente a los navarros, que ocuan el farolillo rojo.

La Roja lo ayudó

En todo caso, el descanso de Iniesta frente al Granada no debe encender ninguna alarma sobre el estado físico del manchego. Fue una rotación normal y ya se vio en los minutos que estuvo en el campo que está en buena forma. Algo que igualmente se comprobó en los dos partidos que jugó con la selección frente a Israel y Francia. Precisamente, su estancia con la Roja fue beneficiosa ya que le ayudó a ganar ritmo de competición y fue tratado por los fisios de la selección, con los que tiene plena confianza.