1973: Duelo entre aspirantes, penalti absurdo... y el Espanyol, líder

Desde la temporada 1952-53 el Espanyol no había vuelto a tener opciones de ganar la Liga, viviendo, incluso, dos descensos a Segunda (1962 y 1969), los primeros de su historia. Pero, de la mano de José Emilio Santamaría, que había tomado las riendas en la campaña anterior,  los blanquiazules no sólo se asentaron en Primera sino que se atrevieron a luchar por las posiciones de privilegio.

Y en esta temporada 72-73 estuvieron, desde el primer momento, en lo más alto. Poco a poco la Liga fue convirtiéndose en un apasionante duelo entre los dos equipos catalanes y los dos madrileños, con constantes alternativas. Y así, se llegó a la jornada 23, la del derbi en el Camp Nou, con el Barça -dirigido por Michels- líder (32), seguido de Espanyol (30), Madrid (28) y Atlético (27). 

Aquel 4 de marzo de 1973 no cabía un alfiler en el Estadi. Ver un duelo de la máxima con los dos equipos arriba de todo era, ciertamente, insólito. Ambos llegaban con la moral muy alta. Los pericos acababan de ganar al Atlético de Madrid y el Barça, en concreto Miguel Reina, llevaba 720 minutos sin encajar un gol. 

El penalti de Gallego

Pese al abrumador dominio del Barça se llegó al descanso con empate a cero. Mediada la segunda mitad, y cuando más fuerte era la presión blaugrana, Roberto Martínez se escapó en un rápido contragolpe y Gallego -que estaba cuajando un fenomenal partido- tocó el balón con la mano al intentar despejar. Franco Martínez no dudó en señalar penalti. El malogrado Jesús Glaría lo transformó y dejó en el marcador un 0-1 que ya no se movería del marcador hasta el final pese a los desesperados intentos locales.

Por cierto que el lanzamiento de la pena máxima debió ser invalidado... porqué el fotógrafo Kike Pérez de Rozas estaba dentro del campo. El Espanyol se aupó al liderato pora ‘goal-average’. El Madrid, que había ganado en Los Cármenes (1-2) se situaba a dos puntos y el Atlético, vencedor del Athletic (2-1), a tres.

El golpe moral fue terrible para el Barça que pese a su irregular  trayectoria en el tramo final -incluso perdió por 4-0 en Castelló- mantuvo su opciones hasta el último lance. Pero el Espanyol tampoco supo aprovechar esta histórica ocasión de ganar por primera vez la Liga, que conquistó el Atlético.