¿Cuántas horas se trabajaba en la Edad Media? Así hemos evolucionado

Así ha evolucionado la jornada laboral desde la Edad Media 

¿Cuántas horas se trabajaba en la Edad Media?

¿Cuántas horas se trabajaba en la Edad Media? / SPORT.es

Durante los siglos V y XV se desarrolló en Occidente un periodo histórico conocido como la Edad Media. Esta etapa histórica es considerada por muchos como una época muy oscura.

Enfermedades, muerte o poca higiene son algunos de los datos que se nos vienen a la cabeza cuando pensamos en esta época, pero poco se conoce acerca de cómo era la jornada laboral en la Edad Media.

En la Edad Media, la sociedad estaba dividida en estamentos. Eran tres los principales: la nobleza y el clero, con sus privilegios, y el pueblo llano o común, formado por la inmensa mayoría y que incluía a artesanos, mercaderes, profesionales, campesinos o pobres. 

Nos encontramos, por lo tanto, en una sociedad feudal. "Se basa en la descentralización del poder: en la cúspide del poder se encontraba el emperador o el rey y en la base los campesinos, que estaban supeditados a los nobles", señalan desde la Universidad de Valencia.

Teniendo en cuenta la estructuración de la sociedad medieval, la mayoría de los trabajadores se dedicaban al campo, mientras que un pequeño porcentaje desempeñaba otro tipo de oficios. Muchos profesionales como herreros, albañiles o panaderos, se agrupaban en gremios por oficios para proteger sus derechos.

Juliet B.Schor es economista y profesora de Sociología en el Boston College de Estados Unidos y se ha dedicado a estudiar a historia del tiempo de trabajo por eso afirma que: "Uno de los mitos más duraderos del capitalismo es que ha reducido el trabajo humano".

Schor despeja las dudas sobre cuántas horas se trabajaban en la Edad Media. Expone que los campesinos tenían más tiempo libre que nosotros en la actualidad: "El ritmo de vida era lento, pausado y el trabajo era relajado. Nuestros antepasados pueden no haber sido ricos, pero tenían una gran cantidad de tiempo para el ocio".

Los estudios indican que el trabajo de los campesinos variaba en función de las épocas del año. Esto quiere decir que durante épocas podían trabajar hasta 16 horas, mientras que otras épocas solo trabajaban unas 8 horas al día.

En el siglo XIII las familias campesinas contaban con alrededor de 150 días no laborales entre festivos oficiales marcados por la Iglesia y eventos sociales destacados como bautizos, bodas u otro tipo de eventos, una cifra que evidentemente supera a la actual.