El técnico pide centrar los recursos económicos en el navarro

Javi Martínez, el fichaje de Tito Vilanova

La lista de alternativas del mercado no convence y el entrenador del Barça no es partidario de arriesgar

Tomàs Andreu

Tito Vilanova aguanta el tipo. El técnico blaugrana conoce bien las estructuras y el funcionamiento interno del club y, en todo lo referente al capítulo de altas y bajas en la primera plantilla, parece seguir a pies juntillas el método de trabajo implantado por su antecesor, Pep Guardiola. Han transcurrido los primeros días de la pretemporada, han pasado varias semanas desde que se hizo público que Thiago Silva no estaba por la labor de fichar por el Barça y el equipo sigue sin reforzarse en el eje de la defensa. Tito no solo no desfallece en su intento sino que continúa en sus trece: descartado el flamante refuerzo del PSG su apuesta única es Javi Martínez. Ni los 40, 50 o cuantos nombres de primera o segunda línea proponga la dirección deportiva. O el Barça ficha al internacional del Athletic o el refuerzo compensatorio de turno puede y debe esperar.

No se trata de un pulso de fuerzas ni de una batalla entre entrenador o dirección deportiva, nada más lejos de la realidad. El técnico expresó en su día los criterios que le llevaban a apostar por Javi Martínez y no se ha apartado una coma de ellos. Es una cuestión de simple coherencia. Tito es partidario de un futbolista consolidado que pueda alternar con garantía las demarcaciones de central y mediocentro. Desde el inicio descartó incorporar por separado a dos jugadores menos contrastados. Otro detalle lógico tras escuchar al de Bellcaire confirmar hace solo tres días su deseo de trabajar con una plantilla corta en efectivos. En la actualidad ya cuenta con 25 integrantes con contrato de primer equipo y añadir dos más supondría otra fuente de problemas. Uno, e incuestionable.

Pero además de parámetros futbolísticos, en el banquillo blaugrana son partidarios de centrar todos los recursos económicos en una pieza codiciada como Javi Martínez. A sus 23 años, y sin ánimos de interferir en los criterios contables de la entidad, se da por descontado que el proceso de amortización de los 40 millones exigidos por el Athletic es más que factible con un contrato largo de cuatro o cinco temporadas. No existen dudas sobre el rendimiento de un futbolista que apenas si necesitará un breve proceso de adaptación. Y es que el estilo de Marcelo Bielsa y su aprecio por el balón facilitaría en buena medida el acoplamiento al sello culé.

Tito solo pide a Javi Martínez, pese a que durante la pretemporada puedan darse uno o varios descartes en la plantilla en forma de cesiones o traspasos. El técnico entiende que sumando la partida económica inicial de fichajes aprobada por la junta directiva, el ahorro que ha significado el adiós de Seydou Keita ¿el club confiaba en su renovación¿ y la probable salida de Ibrahim Afellay dejando en caja siete u ocho millones de euros se puede afrontar una operación de primer nivel como el fichaje del futbolista del Athletic.

Paciencia... o cantera

No habrá prisas ni declaraciones altisonantes desde el banquillo. El Barça disputará los primeros amistosos de la pretemporada sin la presencia del central reclamado a la espera que el club tenga margen de maniobra para cuadrar las cuentas y esperar a que el presidente del Athletic recapacite y abra de una u otra forma las puertas de la negociación. Tito, al igual que en su día hizo Guardiola, aguarda su demanda paciente mientras advierte que en estos momentos no quiere gato por liebre.

Los listados telefónicos publicados con multitud de nombres y apellidos de todos los centrales habidos y por haber ni le preocupan ni le interesan. Los continuos rumores que surgen desde Inglaterra o Alemania tampoco generan incertidumbre. O viene el crack o toca tirar de cantera. Ni más ni menos que el discurso de los últimos años y que por cierto no ha funcionado nada mal si atendemos al rendimiento del equipo y los títulos logrados.

El vestuario, en general, y los posibles canteranos, en particular, que podrían verse afectados de forma directa con la llegada de un central están al corriente de todos los movimientos del club. Jugadores como Fontàs, Muniesa o Bartra han recibido todo tipo de ofertas para abandonar el equipo en esta pretemporada y han decidido quedarse y arriesgar estas semanas. Están convencidos que la cantera seguirá contando de igual forma que lo ha hecho hasta ahora. Si llega Javi Martínez se generará un importante 'overbooking' en la cobertura, en caso contrario no existen dudas al respecto de la apuesta de casa.

Tito Vilanova tiene la última palabra. Hasta la fecha ha revisado la lista de los 40 o 50 principales y la partitura no termina de gustarle. Unos son caros, otros generan dudas técnicas pero el gran hándicap es que no se considera necesario desembolsar un traspaso por un futbolista que no marca las diferencias respecto a unos canteranos que pueden alcanzar su mismo nivel si gozan de oportunidades. La filosofía, por ahora, no se cuestiona.