Altas temperaturas obligan al US Open a usar la "política de calor extremo"

Sensaciones térmicas de hasta 40º han provocado, sin terminar la primera ronda, ocho abandonos

Sensaciones térmicas de hasta 40º han provocado, sin terminar la primera ronda, ocho abandonos / AFP

Sport.es

Cuatro jugadores abandonaron el martes el Abierto de Tenis de Estados Unidos a causa del calor, en un Flushing Meadows a cuarenta grados de temperatura y una humedad sofocante. La temperatura ha obligado a la organización a aplicar por primera vez en su historia la "política de calor extremo" para los partidos masculinos.

En un ambiente cercano a los 40 grados y mucho bochorno, el argentino Leonardo Mayer, por ejemplo, explicó que le fue "imposible" seguir jugando.

"Fui al vestuario un momento y estaban todos los jugadores tirados por el suelo. Volví pero no podía seguir, no me daba el cuerpo", dijo Meyer, que abandonó su partido en cuarto set, cuando perdía contra el serbio Laslo Djere 6-4, 6-4, 4-6 y 2-1.

Lo mismo le ocurrió al lituano Ricards Berarkis en el cuarto set contra el coreano Hyeon Chung, que venció cuando iban 4-6, 7-6, 6-0 y 0-2. La organización informó de su indisposición por calor.

El italiano Stefano Travaglia tampoco pudo acabar contra el polaco Hubert Hurbaaz cuando el partido se le ponía cuesta arriba con un 2-6, 6-2, 6-7 y 0-3. Travaglia sufrió calambres.

Hubo otros abandonos, como el rumano Marius Copil, que tiró la raqueta en el último set por un esguince cuando perdía contra el croata Marlin Cilic por 7-5, 6-1 y 1-1.

Por recomendación del equipo médico del US Open, se aplicó por primera vez en la historia del US Open una "política de calor extremo" para los partidos masculinos, que son a mínimo tres sets. La política consiste en dar un descanso de 10 minutos entre el tercer y cuarto set. 

Sin embargo, para algunos tenistas como el argentio Mayer no es suficiente. ''¿Diez minutos? Yo necesitaba hora y media, yo no iba alcanzar con 10 minutos. Se acordaron tarde de eso"

El árbitro del torneo, Brian Earley, junto con el equipo médico, se encarga de hacer un seguimiento de las condiciones para determinar cuándo la denominada "política de calor extremo" dejará de estar vigente.

Asimismo, la organización debe decidir si cierra el techo de las dos pistas centrales para intentar protegerlas del sol y mejorar el nivel de temperatura de cara a esta noche, que se acercará a los 39 grados, tal como informó el portavoz del US Open, Chris Widmaier.