Rune sobrevive a la emboscada de Cerúndolo y se cita con Ruud en cuartos

[ { "insert": "París, 5 jun (EFE).- Rozó el milagro el argentino Francisco Cerúndolo en Roland Garros contra el danés Holger Rune, sexta raqueta del mundo, contra quien cayó en un 'super tie break' en el quinto set que le apea de los primeros cuartos de final de su carrera, por 7-6 (3), 3-6, 6-4, 1-6 y 7-6 (7) en casi cuatro horas. " } ]

Rune superó a Cerúndolo en octavos

Rune superó a Cerúndolo en octavos / AFP

Albert Briva

Albert Briva

Holger Rune superó la emboscada que el argentino Francisco Cerúndolo le ha preparado en los octavos de Roland Garros. El joven talento danés ha sobrevivido a una situación muy adversa y se ha terminado imponiendo en un 'super tie break' en el quinto set, con un marcador final de 7-6 (3), 3-6, 6-4, 1-6 y 7-6 (7) en casi cuatro horas.

Cualquiera pudo ganar un partido eléctrico disputado en la pista Suzanne Lenglen, donde el tenista de Buenos Aires se quedó a las puertas de guillotinar a su segundo top-10 consecutivo, que habría sido el quinto de una temporada brillante.

Ya en la primera manga ambos jugadores demostraron lo que podía suponer el devenir del partido. El argentino remontó un 5-2 en contra para acabar forzando el tie break. Rune se mostró más sólido y se llevo un primer set, que rápido igualó Cerúndolo aprovechando una rotura en el cuarto juego de la segunda manga.

Peleó con fuerza el tercero de nuevo Cerúndolo hasta que una decisión controvertida del árbitro pareció sacarle del partido. Le quitó un punto porque habló antes de que la bola tocara el suelo, lo que provocó intensos abucheos en la grada. Rune aprovechó a las mil maravillas la situación para volver a adelantarse en el marcador, justo antes de que su físico cayera en picado.

El cuarto fue un paseo militar para Cerúndolo, mientras que su rival parecía resignado a jugarse el pase a cuartos en el definitivo quinto, en el que, con más de tres horas en las piernas, cada bola pesaba el doble.

Y con todo por jugarse en el quinto, empezó la gran locura. El argentino pudo adelantarse en el octavo juego, cuando desperdició un 0-40 para colocarse 5-3 y servicio para cerrar el duelo, pero no remató a Rune, que le devolvió la moneda con creces para situarse 5-4 y su saque. Pero de nuevo reaccionó el de Buenos Aires, que recuperó el servicio y abocó el duelo al cara o cruz del juego de desempate prolongado.

No había mejor manera que decidir el partido en el ya famoso Super Tie Break. Había que ganar diez puntos y ninguno de los dos veinteañeros lograba sacar ventaja, hasta que en el tramo final Cerúndolo dejó escapar dos pelotas consecutivas por milímetros y dio la primera bola de partido al danés, que el argentino estrelló en la red poniendo final a su mejor Roland Garros.

Rune se llevó uno de los grandes partidos hasta el momento de la presente edición y tiene ya su billete para los cuartos de final, donde se encontrará con el mismo jugador que lo apeó precisamente en los cuartos de final el año pasado. Casper Ruud, el finalista de 2022, que ha sellado su pase sin ceder un solo set ante el chileno Jarry.