En vilo por Sergio Ramos

Mientras sigue acurrucado al calor de Luis Enrique, el Real Madrid espera impaciente si se queda o se va

Llega la recta final de la temporada y necesita activar su plan de renovación por si Varane también decide no seguir

Ramos está centrado en batir un récord con España

Ramos está centrado en batir un récord con España / EFE

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

Sergio Ramos sigue sin contestar a la oferta de renovación del Real Madrid. Fuentes cercanas al jugador aseguraron que daría una respuesta a finales de este mes, que en el club esperan impacientes al entrar en la recta final de la temporada sin conocer si seguirá o no. A esto se une la incertidumbre ocasionada por la posibilidad de que Varane también se niegue a renovar. Zidane se quedaría sin sus centrales titulares en el último lustro y tendría que buscar relevos de garantías.

El Real Madrid y Ramos no ha movido un dedo a la oferta hecha y lo que pide el jugador. El club no está por la labor de subir y el balón está en el tejado del futbolista, que debe valorar si la acepta o se va. De momento está al calor de Luis Enrique, que le complace dándole minutos con España para que bata el récord mundial de más internacionalidades y así pueda sacar más pecho. Alaba es una opción real para sustituirle, mientras que el club se ha visto obligado a elaborar una lista de deseos difíciles de cumplir. 

ALABA, PAU TORRES, KOUNDÉ, SCRINIAR…

Si Varane decide no renovar, el Madrid tendrá que ponerlo en el mercado este verano. Hacer caja y buscar un relevo para el francés, aunque tenga a Nacho y Militao en la recámara. Son varias las opciones, pero todas caras. Pau Torres, 60 millones, o Koundé, 80, son las que más gustan, pero se llevarían el dinero que pueda dejar el francés.

No se olvida de Skriniar, el central eslovaco del Inter. Tiene 26 años pero un precio también alto, 60 millones de salida. En el Madrid necesitan saber qué va a pasar con ambos jugadores, porque el tiempo se echa encima y necesita respuestas para saber a qué atenerse. Es otra traba inesperada para elaborar el nuevo proyecto. No entraba en sus cálculos quedarse sin los centrales titulares, aunque cabía esa opción, y su objetivo era potenciar el ataque.