Sin Cristiano Ronaldo, muertos en ataque

Uno de los grandes problemas que tiene el actual Real Madrid es el gol. Esa falta de pegada le trastorna, le incomoda y le hace sufrir en cada partido. Da lo mismo que cree muchas ocasiones, que domine el juego, que bombardee las áreas rivales que no define. Y eso es por la falta de delanteros. La venta de Cristiano Ronaldo ha hecho daño y su dirección deportiva aún no se ha enterado.

El portugués marcaba goles por tres, pero lo vendieron sin buscar un sustituto que al menos marcara por dos. Es más, la actual plantilla madridista solo tiene dos delanteros de oficio, Benzema y Mariano. Los demás, son atacantes reconvertidos como Bale; interiores, como Marco Asensio o Lucas Vázquez, o extremos como Vinicius, que no juega porque es joven. Isco es media punta, y Ceballos y Modric, centrocampistas. No hay más. Por eso, las estadísticas goleadoras del equipo tanto colectiva como individualmente son pobres y no responden a la categoría del Real Madrid.

peores datos

En las dos competiciones más importantes, Champions League y Liga, ha marcado 36 goles en 22 partidos, los peores guarimos del últimos lustro. No se acerca a los tres últimos cursos en los que ganó el título continental, en los que basó sus triunfos en la pegada. La temporada pasada marcó 48 goles en el mismo tramo, 12 más; la anterior, 56, 20 más; y hace tres años, 60, 24 más. Esta temporada no pasa de dos goles por partido, y ha encajado 24, más de uno por encuentro. Su resultado global es favorable, 1,63-1,09. Esto supone ganar los partidos por medio gol de margen, 0,54 por encuentro.

Estadísticas que desnudan la pobreza ofensiva de un equipo que se derrite en la finalización sin un goleador capaz de cristalizar el fútbol que fabrica. Es producto de la descompensación de una plantilla compuesta por 24 futbolistas, 21 de campo, en el que sólo hay dos delanteros o especialistas del gol natos más allá de extremos, interiores o medias puntas. Bale y Benzema, los residuos de la BBC, no cubren ese déficit cuando el club confió en ellos para hacerlo. Sin embargo, las estadísticas de años anteriores advertían de que no lo harían y el club dio la espalda a una realidad que ahora cruje.

INSACIABLE

En los 22 partidos disputados en las dos principales competiciones (15 de Liga y 6 de Champions) del último lustro destaca la ausencia actual de Cristiano Ronaldo. A estas alturas lideraba la clasificación de goleadores en este tramo de encuentros de forma dictatorial. No es de extrañar que sin él no se parezca al Madrid depredador en ataque de los últimos años y es que el portugués marcó 76 goles en los 78 partidos que jugó (se perdió 10). Hizo el 33,3% de los goles de su equipo en las últimas cuatro temporadas, seguido de Benzema a mucha distancia, 41 goles. El tercero de la BBC, Bale, deja claro que lo suyo no es marcar pese a jugar de delantero con 28 goles. El galés y el francés han sido los encargados de tomar el testigo dejado por el portugués, pero llevan entre los dos 16 goles, registro que supera solo en tres a los marcados por el luso en las dos últimas temporadas (13) y muy por debajo de las dos anteriores (22 y 28).

La dirección deportiva del club tendrá que analizar este agujero negro de cara a la segunda parte de la temporada. La necesidad de fichar un goleador es imperiosa, pero en un mercado de invierno es difícil encontrar un complemento de categoría que fortalezca un ataque venido a menos.

MÁXIMO GOLEADOR

El dato que confirma el hueco profundo dejado por Cristiano en el arte de golear queda demostrado en que seis meses después de abandonar la nave madridista es el máximo goleador del  Madrid en el año 2018. El portugués marcó 28 goles hasta la final de Kiev, 22 en la Liga y 6 en la Copa de Europa. Le sigue Bale con 26 (17 en Liga, 5 en Champions, 1 en la Copa y tres en el Mundial de Clubs). Mientras que Benzema ocupa el tercer puesto con 18 goles (9 en Liga, 6 en Champions, 2 en la Copa y 1 en la Supercopa de Europa.