El Madrid, indiferente con el ‘veto’ de Luis Enrique

Pese a que su afición esté ‘quemada’ con el seleccionador, en el club lo ven encantados y como una ventaja

Nacho, Lucas, Asensio o Carvajal venderán las mismas camisetas si juegan o no con España y se ahorran lesiones

Luis Enrique no convoca jugadores del Real Madrid

Luis Enrique no convoca jugadores del Real Madrid / EFE

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

En el Real Madrid miran con indiferencia el veto de Luis Enrique a sus jugadores. No esperaban menos de un ex jugador que abandonó el equipo por la puerta de atrás y que luego declaró su barcelonismo cuando fichó por los azulgrana renegando de su pasado blanco. Ni la llamada del joven canterano Gavi extraña vista su manera de proceder desde que se hizo cargo de la selección y su inclinación hacia los canteranos del Barcelona donde él empezó su periplo como entrenador (tres años en el Barcelona B).

Los que sí están quemados son los aficionados madridistas, que se quejan con crudeza del seleccionador en las redes. Un madridismo que ha dado la espalda a selección mientras que Luis Enrique se mantenga en el cargo como muchas otras aficiones de nuestra geografía. Pero en el club blanco han superado desde hace tiempo los criterios de elección del seleccionador, y lo empiezan a ver como una ventaja que no llame a sus jugadores.

SIN DAÑOS COLATERALES

Que Nacho, Lucas Vázquez, Asensio o Carvajal (casi siempre sin posibilidades de ser llamado al estar lesionado) no jueguen a las órdenes de Luis Enrique no afecta económicamente al club, porque seguirán vendiendo las mismas camisetas, aunque sean pocas, si juegan o no con España y deportivamente les protege para estar en forma cuando jueguen con su equipo evitando lesiones y carga de minutos.

Otra cosa es que Hazard, Bale, Casemiro, Alaba o los extranjeros no fueran con sus selecciones, eso restaría ingresos en la venta de camisetas lejos de nuestras fronteras. En el club no se olvidan de la experiencia que han tenido con Ceballos, que se lesionó con España en las Olimpiadas y se lo han devuelto roto y con un diagnóstico médico erróneo que le tendrá en la enfermería mucho más tiempo del previsto. Además, ha impedido otra cesión del utrerano e incluso un traspaso, y eso sí ha dañado una posible estrategia económica.