La flor de Zidane, en el centro del huracán

Zinedine Zidane durante un entrenamiento del Real Madrid

Zinedine Zidane durante un entrenamiento del Real Madrid / EFE

Juan Manuel Díaz

Juan Manuel Díaz

Zinedine Zidane viajó este lunes a Chipre para afrontar el partido de la jornada 5 de la Champions frente al APOEL Nicosia situado en el centro del huracán que sacude al Real Madrid.

Zidane es cuestionado como nunca tras el empate en el derbi frente al Atlético y una vez que el FC Barcelona se le escapa en la Liga Santander a 10 puntos de distancia.

Es cierto que el tridente de superestrellas, la BBC, se lleva la mayor parte de las críticas. Bale, eternamenete lesionado, y Benzema y Cristiano Ronaldo, sin puntería en la Liga, no abandonan el cadalso. Pero también es parte del debate la capacidad de Zidane, o mejor dicho su incapacidad para sacar rendimiento de la plantilla.

La flor de Zizou

En el momento del éxito, los críticos atribuyeron los triunfos del Real Madrid a la calidad de sus jugadores. Los más generosos otorgaron a Zidane su habilidad para gestionar un vestuario repleto de estrellas, aplicando las rotaciones con cierta habilidad, definiéndolo como un mero alineador sin mayores luces tácticas. Un tipo con suerte, en definitiva.

El balance de 'Zizou' desde que se hizo cargo del equipo resulta irreprochable en cuanto a títulos (2 Champions consecutivas, 1 Liga, 2 Supercopas de Europa, 1 Mundial de Clubes y 1 Supercopa de España). También lo es por algunos registros, como las rachas de partidos sin conocer la derrota o de encuentros seguidos goleando. O por el nivel de fútbol que ofreció en momentos determinados de la pasada campaña.

La mejor del mundo

En el inicio de la temporada 2017/18, más aún tras las victorias en las Supercopas de Europa y de España frente a dos de sus principales rivales, Manchester United y FC Barcelona, el madridismo proclamó que la plantilla era la mejor y más equilibrada del planeta y que, esta vez sí, la cabalgada hacia el ansiado sextete iba a ser triunfal.

Los empates en la Liga frente a Valencia (2-2) y Levante (1-1) provocaron el run run en el Santiago Bernabéu; la derrota poco después frente al Betis (1-2) disparó las señales de alarma.

El doble duelo frente al Tottenham (1-1 en Madrid y 3-1 en Londres) situó al Real Madrid en el planeta tierra. Y el impotente empate sin goles en el derbi contra el Atlético (0-0) ha abierto una crísis de orden 'galáctico'.

Le leen la cartilla

A partir de aquí, se ha desplegado la lista de agravios contra el técnico merengue. La plantilla es peor porque Zidane dejó ir a James, Mariano y Morata, apostó por el siempre lesionado Bale o por el irregular Benzema, y no quiso un relevo para Keylor Navas en la portería. En cambio, aceptó que los refuerzos fueran jugadores de futuro pero todavía pro madurar, como Theo y Ceballos. El propio Cristiano Ronaldo cuestionó esta política de fichajes.

También, ahora más que nunca, se le echa en cara su supuesta falta de capacidad táctica. En la derrota ante el Tottenham criticaron su apuesta por una defensa de tres con Casemiro incrustado entre los centrales.

De 0 a 100

Consideran que no ha aprovechado lo suficiente el talento de Marco Asensio pese a arrancar en un gran estado de forma la temporada, un caso como el de Isco el pasado año, al que tardó en otorgar su confianza.

Su antaño tacto para gestionar la 'unidad B' con las rotaciones ha pasado a ser incapacidad de reacción ante la adversidad -contra el Atlético solo realizó un cambio.

La guinda, que resume las críticas, viene a ser que acabada la suerte -sanción de Cristiano, lesiones de Bale, Navas, Sergio Ramos...- se marchitó la flor de Zidane y no hay un sedimento futbolístico detrás de su trofeo de Mejor Entrenador del Año.  

De la 'Felizidane' a 'Mr. Zichance'

La respuesta de Zidane siempre es la misma, en las épocas de vacas gordas y en las de vacas flacas: él ha cumplido el sueño de entrenar al Real Madrid y es consciente de que cualquier día de estos lo pueden poner de patitas en la calle y no tendrá nada que decir porque en el Santiago Bernabéu sólo vale ganar.

Un discurso humilde e inteligente pero que no le sirve para ponerse a salvo del temporal, cuando ya se pueden leer artículos que hablan de 'Mr Zichance'. La 'Felizidane' de sus inicios en el banquillo madridista quedan lejos.

El Barça está 10 puntos arriba en la Liga y el Tottenham tiene en su mano la priemra plaza del grupo de la Champions. Dos meses es una eternidad en el fútbol y los títulos de Supercopa queda, ahora mismo, tan lejos como el difícil camino hacia el Mundial de Clubes... y el clásico frente al FC Barcelona.