La decisión del Madrid con Güler

Arda Güler no pasaba de la penumbra en enero. Salía de un par de lesiones que le impidieron jugar en sus primeros cinco meses en el Real Madrid y Ancelotti tampoco le dio oportunidades hasta avanzado el curso. Sólo cuando tuvieron atada la Liga empezó a contar con él con cierta regularidad, al margen de hacerlo debutar como titular en la Copa del Rey ante la Arandina el 6 de enero como regalo de Reyes.

El turco tuvo que esperar cuatro meses y 20 partidos para volver a verse en un once titular. Lo hizo tras el triunfo en Liga ante el Barcelona (3-2) que aseguraba la Liga. Ancelotti ha alternado desde entonces el equipo A y el equipo B y Güler ha jugado de titular en cuatro de los últimos siete partidos, para deja boquiabiertos a todos con su precisión ante las porterías rivales (6 goles), además de dejar patente su clase con apenas 19 años y sin el ritmo que ofrece a un futbolista la continuidad.

Los fichajes, decisivos en el éxito del Real Madrid

Los equipos interesados ven una oportunidad de conseguir una cesión por ese estatutos de secundario que tiene en los esquemas de Ancelotti, y han llamado a la puerta del Real Madrid y a la de su representante para conocer su situación. Le ofrecen la oportunidad de tener más protagonismo que en el Real Madrid. Pero el chico es de ideas fijas, y ha dejado claro al club y al italiano que él no se mueve.

Ancelotti, encantado

A esto se suma que Ancelotti está encantado con su aportación. De las dudas que pudo tener hasta febrero, a asegurar a finales de abril que “Güler se quedará el año que viene, no hay dudas”. El italiano sabe que cuando el Real Madrid lo fichó le ofrecieron continuar cedido un año más cedido en el Fenerbahçe, donde tendría la oportunidad de seguir creciendo y no aterrizar en una plantilla echa como la madridista, donde jugaría poco.

Pero Güler lo tenía claro, si salía era para ser jugador de la primera plantilla blanca pese a saber que las oportunidades iban a llegarle con cuentagotas. La seguridad que tiene en sus posibilidades es a prueba de balas, y ha trabajado, trabaja y seguirá haciéndolo con el objetivo de hacerse un sitio en el equipo. El Madrid y Ancelotti lo tienen claro, “Güler no se toca” tras convencer a todos que tiene talento, personalidad y fútbol para triunfar de blanco.