Sheffield United: ¿Cómo hacer historia con un descenso en la Premier League?

El equipo dirigido por Chris Wilder consumó su caída a Championship en la jornada 35, con la dura derrota contra el Newcastle (1-5)

La batalla definitiva: solo puede ganar uno

El Sheffield United está firmando una temporada para olvidar

El Sheffield United está firmando una temporada para olvidar / 'X'

Àlex Calaff

Àlex Calaff

El Sheffield United fue el primer equipo que descendió matemáticamente a Championship en la Premier League. Fue el pasado sábado 27 de abril tras caer contundentemente contra el Newcastle en Bramall Lane (1-5), duelo correspondiente a la jornada 35. Sin embargo, los seguidores de la competición británica se atrevieron a retar a las matemáticas mucho antes, asegurando que era ‘imposible’ que salvasen la categoría. Viendo los datos, demasiados milagros tenían que encadenarse en la ciudad de Sheffield para que eso sucediese.

Estar este año en el banquillo de Bramall Lanemerece tener dietas por peligrosidad. Básicamente, Paul Heckingbottom y Chris Wilder, su sustituto en diciembre, no han tenido piezas con las que competir. El Sheffield United ha encadenado goleada tras goleada, sin el lujo de dar alegrías a sus seguidores, los ‘Blades’, que sufrieron mucho antes de que empezase la temporada. Mientras las estrellas se iban del equipo, llegaban futbolistas poco contrastados, sin experiencia y, como se intuía, incapaces de pelear por salvar la categoría. La temporada, que aún no ha terminado, quedará marcada por una larga lista de récords de dudoso honor.

FUGA DE ESTRELLAS

El Sheffield United ascendió la temporada pasada tras terminar segundo en Championship sumando 91 puntos bajo las órdenes de Paul Heckingbottom. Comandados por Iliman Ndiaye, máximo goleador y asistente del equipo, con 14 dianas y 11 pases de gol, y por Sander Berge, la piedra angular del centro del campo que, además, marcó seis tantos y repartió cinco asistencias, entre otros jugadores.

Iliman Ndiaye y Sander Berge se fueron del Sheffield United al terminar la temporada

Iliman Ndiaye y Sander Berge se fueron del Sheffield United al terminar la temporada / SPORT

Pues bien, ninguno de los dos continuó en el equipo. El primero no quiso renovar, y se fue al Olympique de Marsella a cambio de 17 millones de euros para evitar que se fuera gratis al final de campaña. El segundo, lo vendieron a un rival directo en la pelea por la permanencia, el Burnley, a cambio 14 ‘kilos’. Especialmente el del noruego, un movimiento inexplicable, aún más viendo los fichajes que hizo el club.

En total, gastaron 36 millones de euros netos en fichajes (contando lo ingresado por las bajas y lo abonado por las altas) trayendo a futbolistas como Cameron Archer, Gustavo Hamer, Vini Souza, Auston Trusty, Bénie Traoré, Ivo Grbic, Tom Davies o BenBrereton y Mason Holgate en calidad de cedidos, entre otros. Poca experiencia en Premier y muchos interrogantes en un año en el que si algo hace falta, es poder competir desde la primera jornada. ¿Funcionaron? Es evidente que la gran mayoría no, pero vayamos por partes.

UN COLADERO CON TODAS LAS DE LA LEY

El Sheffield United es el equipo que más goles ha encajado en esta Premier League (97), a una distancia de 20 dianas del segundo equipo más goleado, el Burnley (77). Es decir, encajan casi 3 goles por partido, una cifra que los destaca como el equipo que más goles recibe en una temporada en la historia de la Premier League (formato de 38 jornadas) a falta de tres partidos por jugarse. De encajar cuatro dianas más, superarían los 100 tantos que encajó el Swindon Town en la temporada 1993-94, cuando el formato era de 42 jornadas.

Wes Foderingham, ante Scott McTominay en un duelo de Premier League

Wes Foderingham, ante Scott McTominay en un duelo de Premier League / AP

Unos datos insostenibles para un equipo que ha ido encajando goleada tras goleada (han perdido ocho partidos por una diferencia de tres o más goles). Es cierto que han sufrido bajas importantes atrás, como las de Egan y Basham el centro de la zaga, o Baldock y Lowe en los carriles, pero no justifica la fragilidad enorme que han mostrado durante todo el curso. Grbic encajó 25 goles en nueve partidos (2,77 por choque) y Foderingham, el que ha acabado jugando, 72 en 27 (2,66 por encuentro).

Pero el centro del campo no ha rendido mejor que la zaga, ni mucho menos. Según datos de ‘FBREF’, son el peor equipo de la Premier League en toques por partido, pases (completados, clave, en el último tercio de campo, hacia el área y progresivos), también en centros, carreras progresivas o acciones que generan disparos. El abecedario de lo que no debe de hacer una medular.

UN ATAQUE QUE NO ASUSTA

Evidentemente, los balones no llegan a los atacantes, que suman 34 goles a favor en 35 partidos, el peor registro de la competición, con un promedio de menos de una diana por encuentro. El máximo goleador del equipo es Oli McBurnie, con seis tantos, seguido de Ben Brereton, que llegó en enero, con cinco. 

Los jugadores del Sheffield United celebran un tanto ante el Chelsea

Los jugadores del Sheffield United celebran un tanto ante el Chelsea / @SheffieldUnited

En total, el Sheffield United ha ganado solo tres partidos: 2-1 contra los Wolves, 1-0 ante el Brentford y 1-3 frente al Luton Town, empatando el registro del Sunderland 05/06, Aston Villa 2005-06 y el Huddersifeld 2018-19 como uno de los peores equipos de toda la historia del torneo. Por suerte, les supera el Derby County de la 2007-08, que solo ganó un choque consiguiendo 11 puntos.

TRES VICTORIAS Y 16 PUNTOS

El Sheffield suma 16 unidades en su casillero, pero aún tiene la oportunidad de sumar hasta 25 (contra Nottingham Forest, Everton y Tottenham). Pero si no lo consiguen y se quedan con los que tienen, además de poder convertirse en el segundo equipo con más derrotas cosechadas en una temporada de Premier League, podrían destacarse también como el tercer peor equipo de la historia de la competición británica, superando únicamente al citado Derby y al Sunderland 2005-06, con 15 puntos. 

William Osula, hundido con los resultados del Sheffield United

William Osula, hundido con los resultados del Sheffield United / EFE

La temporada ha sido un suplicio para los jugadores, que han protagonizado escenas de mucha tensión, como una discusión entre Jack Robinson y Vini Souza en la derrota ante los Wolves que no acabó a golpes de milagro. Este nerviosismo también se traduce en las tarjetas, siendo el segundo equipo con más amarillas de la liga (94) y el tercero con más rojas (4). 

También para los aficionados, que tan solo han podido celebrar tres triunfos en 35 jornadas y han tenido que acudir al estadio cada semana con la pequeñísima esperanza de ver algo distinto a una derrota. Y para los entrenadores, primero Paul Heckingbottom, y después Chris Wilder, que nada pudo hacer para revertir la situación. Curiosamente, Heckingbottom fue el sustituto de Wilder cuando se consumó el descenso de 2021.

Chris Wilder, entrenador del Sheffield United

Chris Wilder, entrenador del Sheffield United / EFE

Ahora, sin nada más por lo que luchar que el honor, quedan dos cosas pendientes por resolver. ¿Darán alguna alegría a sus seguidores antes de terminar la temporada? ¿Conseguirán dar el nivel en Championship y volver el año que viene a Premier League?