Todo pasa por Mac Allister

El argentino se lució en su nuevo rol en el conjunto red; jugó de doble cinco con Alexander-Arnold

El en Brighton actuaba de mediapunta, donde destacaba por su gran despliegue físico y su capacidad por pisar el área rival

Mac Allister, con la camiseta del Liverpool

Mac Allister, con la camiseta del Liverpool / LFC

Clàudia Espinosa

Clàudia Espinosa

El Liverpool tenía la clara prioridad de reforzarse y necesitaba a alguien que ilusionara. Ese alguien no ha sido otro que Alexis Mac Allister, el futbolista que ha llegado para ser el amo y señor del centro del campo 'red'.

El argentino ofreció un nivel extraordinario en el pasado Mundial de Qatar e impresionó a la mayoría de los grandes de Europa, pero escogió al conjunto de Klopp, que pagó unos 40 millones de euros por él.

Un fichaje que volvía a hacer soñar al aficionado 'red' con recuperar al mejor Liverpool y poder competir en la Premier y en Europa, aunque este año deberá conformarse con la Europa League.

Y ahora que ya se le ha podido ver en acción, el centrocampista no ha defraudado y se ha exhibido en la medular 'red'. Ya ha disputado varios amistosos de pretemporada con su nuevo equipo, donde se le ha visto partir desde el interior derecho.

Sin embargo, el lunes se enfrentaron al recién ascendido a la Bundesliga, el Darmstadt, donde Jürgen Klopp inventó y triunfó.

Un nuevo rol para mandar en la medular

Formó en el eje central como pivote, pero actuó de doble '5' junto a Alexander-Arnold, para ambos encargarse de manejar los hilos del equipo. Y es que pese a que el argentino jugaba de mediapunta en el esquema 4-2-3-1 del Brighton de DeZerbi, el técnico alemán ha apostado por darle un rol distinto en su nuevo equipo.

Tanto en su ex equipo como en la selección argentina, Mac Allister destacaba por su gran capacidad para pisar el área rival y por tener gol. Goza de un gran físico para desplegarse por todo el terreno de juego y poder ser una opción de pase constante, además de colaborar en la recuperación de balón.

Sin embargo, el gran nivel que ofreció en la posición de pivote que compartió con el inglés en su último partido, lo cambia todo. Su rol en el once de Klopp se ha vuelto una incógnita, pero lo que está claro es que si rinde así con Alexander-Arnold como compañero de fatigas, el dominio de balón del Liverpool está asegurado.