Me enfadé con el Barça B

Estanis Pedrola, ante el Real Madrid Castilla

Estanis Pedrola, ante el Real Madrid Castilla / FCB

Carles Sans

Carles Sans

Me senté el domingo frente el televisor con ganas de ver cómo el Barça B defendía los dos goles de ventaja del partido de ida frente al Real Madrid Castilla. El Barça lo tenía asequible si los jugadores de Rafa Márquez ponían todo lo que había que poner para superar la eliminatoria y enfrentarse al Eldense en el partido final que había de decidir quién asciende a la Liga Smartbank.

Como socio culer hubiera sido un planazo de domingo ver a los chavales del B superar la eliminatoria en el campo de su máximo rival. Sin embargo, mi decepción con el juego que desplegaron, especialmente la primera parte, fue clamorosa. El Barça salió a conservar un resultado y no a aumentarlo, que hubiera sido lo más productivo. Márquez tuvo miedo, ese miedo que el Real Madrid no tiene en este tipo de eliminatorias; me fastidia decirlo pero es así. Me enfadé mucho.

En la segunda parte los del Barça se atrevieron algo más y desperdiciaron dos ocasiones muy claras de gol, pero un par de contras del Real Madrid fueron suficientes para perforar la portería blaugrana y lo que es peor: ¡El penalti en el minuto 95! Un penalti de esos que no sabes si le da en la mano o no, pero que los árbitros, jugando en territorio Florentino, prefieren pitarlo por si acaso.

Pero penalti aparte, lo que hizo que el Madrid pasara fue la falta de ambición blaugrana. Era un partido que los de Márquez tenían muy encarrilado y se paralizaron, más por responsabilidad del encuentro que por el juego del oponente, un Madrid que, como es habitual, más voluntarioso que bueno. A pesar del resultado, dice Márquez que hay que estar contentos por la trayectoria de un equipo que, al parecer nadie daba un duro a comienzo de temporada. Pues nada, contentémonos con eso.

Apagué el televisor sin acabar de oír las excusas que quedaba por decir. Toda una temporada soñando en una recompensa que tiras el último día y que se la entregas nada menos que a tu máximo rival.

En fin. Esto ya lo hemos visto en más ocasiones. Què hi farem! El año que viene se volverá a intentar, eso sí, con otros jugadores.

En fin. Esto ya lo hemos visto en más ocasiones.