Muguruza, a un solo golpe de la gloria en Melbourne

Muguruza se la juega este sábado ante Kenin

Muguruza se la juega este sábado ante Kenin / AFP.

David Boti

David Boti

Llegó, por fin, el momento de Garbiñe Muguruza. Este sábado quiere volver a colocar su nombre entre las mejores del circuito WTA consiguiendo su primer título en el Open de Australia. 4 de junio de 2016 en París y 15 de julio de 2017 en Londres. Esas son las dos grandes fechas que han marcado la carrera de la española y, a sus 26 años, podría añadir una más a su palmarés.

No solo quiere levantar el tercer Grand Slam de su carrera, sino también convertirse en la primera tenista española de la historia que lo consigue en Melbourne. Lo intentaron Arantxa Sánchez Vicario (1994 y 1995) y su actual entrenadora, Conchita Martínez (1998). Ambas se quedaron con la miel en los labios. Un solo partido les separó del éxito y 22 años después de esa última final con sabor español, la mejor representante de la ‘Armada’ quiere poner punto y final a esa sequía en las antípodas australianas. “Me gusta lo agresiva que es, la capacidad para aguantar de fondo y  generar diferentes tipos de juego, aunque lo que más me entusiasmó fueron sus ganas por trabajar en pretemporada. Se está viendo a una Garbiñe muy competitiva y eso es muy bueno”, aseguró ayer su técnica en la rueda de prensa oficial.

Su rival, la estadounidense Sofia Kenin jugará su primera final de este calibre en la Rod Laver y la propia Conchita desvelaba cuáles pueden ser las claves del partido. “Es muy difícil desconectar completamente antes de una final como esta. Garbiñe deberá ser paciente e intentar llevar la iniciativa aunque habrá momentos en los que no se podrá. La idea es que ella pueda estar suelta”, aseguró.

SU CUARTA 'YANKEE' EN UNA FINAL DE GRAND SLAM

Curiosamente, Garbiñe afrontará un nueva final por un título de Major contra otra tenista nacida en los Estados Unidos. Y ya van cuatro. En los tres precedentes, sus rivales cuentan con nacionalidad del país norteamericano. La primera, la que cedió en Wimbledon 2015, fue contra Serena Williams. Posteriormente, se vengó en Roland Garros un año más tarde contra ella y después conquistó, por primera vez, el título en Wimbledon 2016 ante su hermana Venus Williams ya con Conchita en su ‘box’.

El dato más curioso que arroja su presencia en esta primera final importante del año es que la natural de Caracas ha logrado alcanzar la última ronda del torneo ‘aussie’ tras ceder el primer set de su primer compromiso por 0-6. Cuando todavía acusaba el proceso febril que le mermó en el tramo inicial de la competición se quedó a solo seis juegos de decir adiós a las primeras de cambio. Su paciencia y su perseverancia, alejada de los focos mediáticos, le ha permitido reconstruirse y volver a mostrar esa versión que le llevó a ser la número uno.

Muchas de las rivales a las que ha dejado por el camino en estas dos semanas han asegurado que lo tiene todo para volver a estar en lo más alto, entre ellas, la rumana Simona Halep. Y ella, ahora sí, se lo cree.  “Me está recordando cuando ganó Wimbledon porque superó muchas situaciones complicadas”, finalizó su entrenadora. “Entrenamos toda nuestra vida para estar en estas situaciones. Yo recuerdo todas con momentos de alegría, de tensión, de todo, muchas emociones”, espetaba Garbiñe. Tiene el cuarto a un solo paso.