Una Super Bowl sorpresa

Dos equipos que no entraban en las quinielas para llegar a la final como Los Angeles Rams y los Cincinnati Bengals protagonizarán esta madrugada el partido por el título de la NFL

Comienza una nueva era en la liga después del anuncio de la retirada del legendario Brady. Joe Burrow, el quarterback de los Bengals, quiere tomar su testigo llegando como ‘underdog’

Los cascos de Rams y Bengals, junto al trofeo Vince Lombardi

Los cascos de Rams y Bengals, junto al trofeo Vince Lombardi / AFP

Alba López

La gran fiesta del fútbol americano ya está aquí. Esta madrugada del domingo, a partir de las 00:30 horas, Los Angeles Rams y los Cincinnati Bengals se enfrentan en la Super Bowl LVI, que en esta ocasión se celebra en el SoFi Stadium de Los Ángeles. 

Los Rams, por lo tanto, tendrán la oportunidad de levantar el trofeo Vince Lombardi en su propia casa, un estadio lujosísimo que costó la friolera de 5.000 millones de dólares construir y en el que los carneros quieren convertirse en el segundo equipo de la historia en conseguir el anillo de campeón ante su afición. El año pasado fue la primera vez que se dio esa circunstancia, cuando los Buccaneers de un tal Tom Brady conquistaron la Super Bowl en Tampa.

UNA NUEVA ERA EN LA NFL

Será la primera final por el campeonato una vez conocida la noticia de la retirada del legendario quarterback, quien anunció que colgaba el casco el pasado 1 de febrero. Arranca, así pues, una nueva era en la NFL después de 22 años de dominio del histórico mariscal de campo, que dice 'adiós' a la liga con siete Super Bowls en su haber, más que ninguna franquicia de la NFL.

Precisamente Joe Burrow, el quarterback de uno de los dos equipos finalistas, los Cincinnati Bengals, parece el hombre destinado a tomar el testigo de Brady en la competición. Son obviamente, palabras mayores, pero a sus 25 años 'Joe Cool', apodo que le han puesto en Estados Unidos por su frialdad a la hora de jugar, parece preparado para el gran salto.

Su equipo, los Bengals, llegan con la etiqueta de 'underdog' (menos favorito) a la final, pero tienen suficientes armas para dar el susto a su rival si todo sale según lo planeado por el entrenador Zac Taylor. Los Angeles deberá vigilar especialmente a los receptores Ja'Marr Chase, que ha recibido el premio de Novato Ofensivo del Año, y Tee Higgins si no quieren sufrir en defensa. 

La línea que protege a Burrow es la parte más débil del conjunto de Cincinnati. Y por ahí tratarán de presionar los californianos con un Aaron Donald que es un auténtico animal por su corpulencia y velocidad. No hay nadie en la liga ni en su posición ni en otra que marque tantas diferencias como él. Los Bengals colocarán dos hombres encima suyo para tratar de frenarle, pero por ahí puede empezar a desmoronarse la protección a Burrow. Y si eso ocurre, el partido pinta muy mal para los de Ohio.

LOS RAMS, FAVORITOS

La conexión en ataque entre Matthew Stafford y Cooper Kupp será la gran baza de los Rams, a los que todas las casas de apuestas dan como ganadores de esta Super Bowl. El quarterback, de 34 años, está en el momento más dulce de su carrera después de abandonar una franquicia perdedora como los Detroit Lions para irse a jugar a Los Ángeles. 

Y en su primer año en la ciudad de las estrellas tendrá la posibilidad de ganar su primer anillo. Cooper Kupp, por su parte, llega a la final como Jugador Ofensivo del Año y tras liderar la NFL en recepciones, yardas aéreas y touchdowns. La maravillosa mente ofensiva del genial Sean McVay, técnico de los Rams, también juega a favor del conjunto angelino, que quiere quitarse la espinita de la Super Bowl perdida contra los Patriots en 2019.