BALONCESTO - NBA

Los mejores momentos de Pau Gasol en el All-Star Game

Repasa los grandes momentos del paso de Pau Gasol por el All-Star Game

Gasol disputará este domingo su sexto partido de las estrellas

Gasol disputará este domingo su sexto partido de las estrellas / EFE

Jaume Tarragó

Este fin de semana se disputa el <strong>All-Star Game</strong>, el partido que aglutina los mejores nombres de la NBA. En su edición número 65, Pau Gasol vuelve al ruedo, esta vez arrancando desde el banquillo, y ya suma seis participaciones en este tipo de encuentros. Para celebrar la selección del mayor de los hermanos Gasol, hemos escogido los mejores momentos de sus participaciones.

¿Quién no recuerda las alcachofas de Sant Boi? El legendario Andrés Montes nos hizo vibrar durante muchas madrugadas de baloncesto y éste, sin duda, fue un momento especial para todos. En 2006, <strong>Pau Gasol</strong> se convirtió en el primer español en participar en un <strong>All-Star Game</strong> y, aunque no anotó ni un solo punto, inició un camino que dio muchas alegrías al baloncesto nacional y le confirmó como uno de los grandes de la liga. 

La siguiente vez que Pau disputó un All-Star Game, llegó con el uniforme de los Lakers. Tras firmar con el equipo angelino en la anterior campaña y llegar hasta las Finales de la NBA, Gasol adquirió la imagen del escudero que reclamaba Kobe Bryant. Ese mismo año, el 2009, obtendría su mayor logro: el anillo de campeón de la NBA. 

La percepción de Pau en Estados Unidos mutaría de un año para otro. En 2010, el hermano mayor de los Gasol ya tenía un título de campeón a sus espaldas y no llegaba como "un europeo blando" al acontecimiento. Su tercera selección y el éxito con los Lakers le permitieron ganarse un nuevo estatus, que le catapultó hasta lo más alto de la NBA. 

En el All-Star Weekend de 2011, Pau se encontraba pletórico tras el segundo anillo, viviendo sus mejores momentos como jugador en Estados Unidos. Lo que no sospechaba es que, a partir de entonces, todo se torcería. Después de su cuarta participación en el All-Star, vinieron tiempos más oscuros: el enfado con Phil Jackson, la torpeza de Mike Brown, el ostracismo con D'Antoni y la llegada ilusionante de Howard, que terminó por deshacer el equipo.   

En 2015 llegó su renacimiento. Durante el verano de 2014, decidió comprometerse con los Bulls por un sueldo más típico de jugador veterano en sus últimas temporadas de provecho, pero demostró que tiene batería para rato. La buena campaña en Chicago coincidió con el excelente estado de forma de su hermano Marc y les valió para protagonizar una de las estampas más recordadas de la historia del baloncesto español: el salto entre hermanos