Aspas frota la lámpara en el Villamarín

El Betis pierde fuelle en la lucha por la Champions. Segunda derrota consecutiva del cuadro verdiblanco, que sucumbió en el Benito Villamarín ante un Celta solidario en los esfuerzos defensivos y liderado en ataque por el genio de Iago Aspas (0-2). El ídolo celeste marcó los dos goles del duelo antes del descanso. El primero, de penalti. El segundo, un golazo, tras robar el balón a Víctor Ruiz y regatear a Rui Silva.

Betis-Celta

LaLiga Santander

BET

0

2

CEL

Alineaciones

Betis
Rui Silva; Bellerín, Bartra, Víctor Ruíz, Álex Moreno; Carvalho, Guardado (Fekir, 58'); Lainez (Rodri, 46'), Canales (Tello, 80'), Juanmi; Willian José (Borja Iglesias, 58').

Celta
Dituro; Aidoo, Okay, Carlos Domínguez, Javi Galán; Fran Beltrán; Brais Méndez (Veiga, 86'), Denis Suárez, Cervi; Iago Aspas y Santi Mina.

Goles

0-1 M. 36 Iago Aspas (pen.). 0-2 M. 45+2 Iago Aspas.

Árbitro

Soto Grado (riojano). T.A.: Willian José (53') / Denis Suárez (33'), Cervi (90').

Incidencias

Partido disputado en el estadio Benito Villamarín ante 41.566 espectadores correspondiente a la jornada 19 de LaLiga Santander.

Se veían las caras dos de los goleadores más en forma del fútbol español, Juanmi y Iago Aspas. El delantero andaluz llegaba a la cita con 11 goles en su cuenta particular, siete en las últimas cinco jornadas, mientras que el incombustible capitán celeste había anotado ocho tantos hasta la fecha. Un cara a cara entre artilleros que caería del lado del 'Principe de las Bateas'.

El duelo amaneció con un trepidante intercambio de golpes. Amenazó primero el Celta en una rápida transición que Santi Mina finalizó con un tiro seco y ajustado a la cepa del poste. Aguantó bien Rui Silva, que evitó el tanto con una mano firme a ras de suelo. La réplica bética llegó en un cabezazo centrado de Carvalho. Había calidad a raudales sobre el césped. Si Canales encendía al Villamarín con un taconazo, Iago Aspas respondía con un control orientado de espuela.

El Betis pareció dar un paso al frente superado el primer cuarto de hora. Más agresivo, impulsado por un Guardado omnipresente en la presión, el cuadro sevillano se adueñó del cuero y encerró por momentos al Celta. Sin embargo, el cuadro gallego, solidario en los esfuerzos, apenas sufrió y Dituro no llegó a mancharse los guantes.

El equipo dirigido por el Chacho Coudet estrenó el marcador en una acción aislada. Cervi y Guardado fueron a disputar dentro del área un balón dividido que se alejaba del arco. Llegó antes el argentino, que fue derribado por el ímpetu del mexicano. Penalti. La responsabilidad fue para Iago Aspas, que marcó con un remate raso y centrado mientras que Rui Silva se venció a su izquierda.

El tanto cambió la dinámica del encuentro. Los atacantes béticos no olían el balón, mientras que el Celta daba sensación de peligro en cada carrera. Papel destacado para Javi Galán, que secó a Lainez y amenazó en velocidad por el carril izquierdo del ataque celeste.

El Celta rubricó su buen momento antes del descanso gracias a una genialidad de Iago Aspas. Santi Mina arrancó la acción en campo y tras cruzarse medio campo en conducción, dio un pase defectuoso en dirección al capitán. Víctor Ruiz interceptó el envío, pero Aspas, pillo, adivinó la dirección del control y le birló la cartera. Se pegó el cuero a la bota, cruzó por delante del zaguero que le dejó pasar para no cometer penalti y regateó a Rui Silva antes de marcar a puerta vacía. Golazo y 0-2 al descanso.

El Betis no tenía tiempo que perder y Pellegrini puso toda la carne en el asador. Rodri entró por el intrascendente Lainez, Fekir reemplazó a Guardado y Borja Iglesias relevó a Willian José. Pese a la acumulación de talento, el Betis no logró someter a un Celta capaz de defender con disciplina cerca de su portería y también de aguantar la posesión.

Ante la falta de espacios y la incapacidad para acelerar la circulación de balón, el cuadro verdiblanco lo intentó de lejos con éxito escaso. Por contra, el Celta pudo sentenciar en una rápida transición que Santi Mina finalizó con el exterior y exigió la parada de Rui Silva. Con más corazón que cabeza, el Betis intentó recortar distancias hasta el pitido final pero se marchó de vacío.