¡Qué brutalidad del exazulgrana Nigel Hayes-Davis!

Por una serie de circunstancias, Nigel Hayes-Davis no logró triunfar en el Barça en la temporada 2021-22 y al verano siguiente cambió los colores azulgranas por el amarilla y el azul oscuro del Fenerbahçe, donde está maravillando cada día más.

Y lo más curioso del caso es que este viernes ha hecho historia en la Euroliga en Estambul a las órdenes de Sarunas Jasikevicius, con quien precisamente no terminó de encontrar su sitio por sus problemas con el tiro y su irregularidad.

Brizuela no evita la merecida 'venganza' de Jasikevicius

De hecho, la verdadera metamorfosis de Hayes-Davis llegó con Dimitios Itoudis, el histriónico técnico heleno que ganó la Euroliga con el CSKA y que no ha heredado el talento de su maestro Zeljko Obradovic... pero sí sus malas pulgas.

La llegada de Saras ha relanzado a los turcos con Hayes-Davis como uno de sus principales referentes en un equipo en el que también está otro exbarcelonista como Nick Calathes, quien acabó mal con el lituano y ahora vuelve a coincidir con él.

Desde este Hayes-Davis es historia de la Euroliga. Aprovechando la visita de la 'comparsa' del ALBA Berlin (derrotó al Barça en tierras alemanas) y el 103-68 con 83-63 al final del tercer cuarto, el ala-pívot de Ohio ha anotado 50 puntos. ¡Sí, 50!

De esta forma, el ex del Barça ha superado el récord del torneo en un solo partido que estaba en posesión de su compatriota exnacionalizado turco (el Gobierno le quitó la nacionalidad) Shane Larkin con en Anadolu Efes en la temporada 2019-20 con 49.

Además, los porcentajes en el tiro y las cifras encumbran aún más el partidazo del graduado en Finanzas e Inversión Bancaria por la Universidad de Wisconsin-Madison ha acabado con 9/11 en tiros de dos, 9/16 en triples, 5/7 en tiros libres, dos rebotes ofensivos, un robo, seis faltas recibidas y +46 de valoración.

A su estela, el interior Johnathan Motley que tantos problemas dio sobre todo a Willy Hernangómez ha vuelto a demostrar que es de largo uno de los mejores interiores de la competición con 18 puntos, cinco rebotes y +30 de valoración.

Sin duda, un premio más que merecido para un Hayes-Davis que dejó huella en el vestuario azulgrana por su carácter abierto y por su deseo de comunicarse con sus compañeros en el mayor número de idiomas posibles en un curso difícil en el que también sufrió el Covid en sus carnes. De hecho, con Sanli chapurreaba turco por la temporada que jugó en el Galatasaray y a la semana de llegar a Barcelona saludaba con un "Buenos días, ¿cómo estáis?"