El plan de desconfinamiento de la F1 en verano

El Red Bull Ring austríaco podría abrir el calendario de F1

El Red Bull Ring austríaco podría abrir el calendario de F1 2020 / Red Bull

Laura López Albiac

Laura López Albiac

Liberty Media, propietaria de los derechos de la F1, trata de reconfigurar el calendario para la actual temporada, aunque como en el caso de MotoGP, es muy difícill anticipar escenarios sin conocer la evolución del coronavirus en cada país. A pesar de ello, los gestores del campeonato piensan aún en recuperar el tiempo perdido y comenzar a competir de manera intensiva a partir del verano.

El Gran Premio de Francia se mantiene como la primera ronda de F1 para el 28 de junio, pero es poco probable que el evento en Paul Ricard se pueda celebrar en esa fecha. Así las cosas, GP de Gran Bretaña, previsto para el 19 de julio en el calendario original, se perfila como una posibilidad más realista. Los británicos se han ofrecido para albergar dos carreras y aceptan organizarlas sin público en las gradas. Y lo mismo ocurre con el GP de Austria, que podría hacer doblete sin espectadores el 5 y el 12 de julio, antes de ir a Silverstone.

Helmut Marko, asesor y mano derecha del propietario de Red Bull y del circuito de Spielberg, Dietrich Mateschitz, ha explicado en motororsport.com algunos detalles del plan de desconfinamiento de la Fórmula 1. Considera que la ubicación del circuito, alejado de los grandes núcleos de población, permitiría rodar allí con mucha seguridad. 

El Red Bull Ring podría dar el pistoletazo de salida a la temporada con dos carreras separadas por una semana o incluso quince días, en las que el personal del campeonato y los equipos permanecerían aislados en la zona. El doble Gran Premio de Austria no tendría espectadores, invitados ni medios de comunicación, y los equipis reducirían a su personal a 45 trabajadores. El uso de mascarillas también podría ser obligatorio y se puede requerir que el personal que viaje presente un certificado de salud que confirme que no están infectados por el COVID-19.

"La comunidad de Fórmula 1 teme ser infectada y quiere aislarse lo máximo posible. Al mismo tiempo, eso es bueno porque la población también teme ser infectada. Todos tienen miedo y, por lo tanto, todos serán extremadamente cuidadosos", apunta Marko, que cree que la cobertura de televisión puede llevarse a cabo con un número mínimo de personal pero también se deberían celebrar las carreras de apoyo de F2, F3 y Porsche Supercup para completar las horas de retransmisión. "No sé si la televisión se perderá historias del gran premio porque habrá restricciones con lo que se graba, pero tal vez podamos retransmitir carreras de apoyo en su lugar".

Marko confía en que el plan de Austria pueda obtener apoyo del gobierno, ya que cumplirá con los requisitos de salud y seguridad. "Intentaremos reducir lo máximo posible los miembros de los equipos y proveedores. Esto aumenta las posibilidades de que se pueda recibir la aprobación. Pero todo esto solo puede hacerse dentro de las normas de seguridad austríacas, que todavía seguirán vigentes en ese momento.

Eso sí, Liberty también quiere garantías máximas de seguridad y sobre todo, quiere evitar que se repita un fiasco como el de Australia, dónde intentaron comenzar el Mundial con normalidad cuando la pandemia ya era una realidas y se vieron obligados a abortar el intento tras confirmarse el contagio de varios miembros del paddock y la retirada por esa misma razón del equipo McLaren.