El Leipzig deja escapar dos puntos ante el colista

Tropiezo inesperado del Leipzig frente al colista en un encuentro marcado por la expulsión de Upamecano a los 43 minutos. El equipo de Red Bull se había adelantado en el 27' con gol de Schick, pero con uno menos cedió la iniciativa y se encerró atrás durante toda la segunda mitad. Pudo marcar el segundo al contraataque pero perdonó y, en el último suspiro, Strohdiek firmó el merecido tanto del empate para el Paderborn. 

Todas las apuestas señalaban al equipo de Red Bull como indiscutible favorito para llevarse los tres puntos. Los de Nagelmann llegaban al encuentro tras diez jornadas sin perder, los mismos partidos qu el Paderborn encadenaba sin conocer la victoria. Decidido a resolver el choque por la vía rápida, el Leipzig entró al duelo con más intensidad. Suya fue la primera ocasión, un tiro cruzado de Nkunku desde la frontal que repelió Zingerle. 

El colista solo daba señales de vida en alguna salida esporádica al espacio, como la que le costó la primera amarilla a Upamecano sobre el cuarto de hora de juego. El mando, sin embargo, era de un Leipzig falto de fluidez en la elaboración del juego. Tan solo las internadas de Angeliño por banda izquierda y el desequilibrio de Werner lograban poner en apuros al disciplinado Paderborn. 

Pero a la primera que logró combinar con espacios y en velocidad, el Leipzig no perdonó. Nkunku recibió libre de marca en zona de enganche y cedió el cuero para la carrera de Werner, que asistió a Schick en boca de gol. Golpe tremendo para el Paderborn, que por poco no recibió el segundo en un saque de esquina que Collins salvó bajo palos. 

A todas luces el partido parecía encarrilado, pero dio un giro inesperado al filo del descanso. Upamecano agarró reiteradamente a Mamba en el centro del campo y pateó con rabia el cuero cuando el colegiado sancionó la infracción. Resultado: segunda amarilla. Este pueril error dio alas al colista, que poco después probó suerte en un latigazo de Vasiliadis que acarició el larguero. 

Nagelmann optó por protegerse y retiró al goleador Schik para introducir a Halstenberg como tercer central. El Leipzig dio un paso atrás y perdió el control del encuentro en favor de un Paderborn tan voluntarioso como falto de gol. Aún sin proponer demasiado, las ocasiones más claras fueron para el equipo de Red Bull. El contragolpe y las acciones a balón parado, sus únicas armas. 

Olmo obligó a la estirada de Zingerle tras engatillar un balón suelto en el área después de un saque de esquina. Y, poco después, Werner a punto estuvo de aprovechar un pase temerario de Collins hacia su portero. El ariete llegó antes al balón y superó al portero, pero no acertó a definir entre los tres palos. 

Pero con el avance del crono, el empuje del Paderborn fue a más. Nagelsmann respondió con más cambios defensivos y el Leipzig acabó el duelo encerrado en su área, pidiendo la hora. Hasta que en la última ocasión del choque, Strohdiek pescó un balón suelto en el área para lograr el merecido tanto del empate. Duro revés para el equipo de Red Bull, que pierde la oportunidad de apuntalar su estatus en la zona Champions.