Schuster, ejecutado a las puertas del Camp Nou

Ramón Calderón quemó ayer su penúltima bala. Le queda la que lleva grabada el nombre de Pedja Mijatovic porque la de Bernd Schuster la disparó ayer. El alemán fue fulminado a quemarropa y su cadáver ya tapa el escándalo de la presencia de los ultras en la Asamblea del domingo. Una cortina de humo en vísperas de cerrar la fase de grupos de la Champions y a cuatro días del clásico ante el Barcelona. Su sustituto, como adelantó en su día SPORT, es Juande Ramos que firmó un contrato hasta el 30 de junio y con opción de renovar un año más.

El que disparó la bala fue Pedja Mijatovic, que debió suspirar aliviado cuando se despidió de Schuster y poner fin a una relación turbulenta. El montenegrino exculpó a Ramón Calderón. "Como siempre, no ha influido en la toma de esta decisión que es de la dirección deportiva. Ramón Calderón siempre nos ha dejado trabajar. En este caso, y en otros, nunca ha influido", afirmó.

Mijatovic, que anunció la destitución de Schuster acompañado del director general de la presidencia Miguel Ángel Arroyo y del propio Juande Ramos, aseguró que la decisión se ha madurado desde que finalizó el encuentro ante el Sevilla y decidida en la reunión extraordinaria de la junta que precedió a la rueda de prensa: "El acuerdo de resolver el contrato del entrenador ha sido por unanimidad, en términos de absoluta cordialidad y consensuados por ambas partes, y de nombrar a Juande Ramos como sustituto en el cargo".

También afirmó, aunque no se lo cree nadie, que las declaraciones efectuadas por el alemán tras la derrota ante el Sevilla no habían sido decisivas, y que si no la adoptaron antes fue por la Asamblea del pasado domingo. "Las declaraciones del otro día no han influido. Han sido más cosas. Hace un par de semanas afirmé que no dudaríamos a la hora de tomar decisiones difíciles", aseveró.

Lo evidente es que Ramón Calderón había ratificado en el cargo al alemán en dos o tres ocasiones en el último mes, y ya se sabe que a entrenador ratificado, entrenador cesado. El director deportivo aseguró que la determinación final fue adoptada con "una profundidad tremenda" y que lo habían pensado por ser una "decisión dura". El momento no parece el más adecuado, ya que hoy el Real Madrid se mide al Zenit y el sábado al Barcelona y una noticia así puede ser traumática para un equipo que ya de por sí no anda demasiado fuerte de cabeza, aunque sí de espíritu por lo que lucha en el campo.

Mijatovic aseguró que antes de hacer pública la decisión había mantenido una reunión con el damnificado: "He hablado con Bernd esta mañana, y hemos analizado todo lo que ha pasado en estos meses. Ha sido una reunión de amistad, hemos puesto sobre la mesa las dificultades que se nos han presentado y, de mutuo acuerdo, se ha tomado la decisión. Él ha aceptado la noticia de buen talante, pero con la lógica tristeza".

"La reunión que hemos mantenido ha sido agradable a pesar de las circunstancias. Quiero agradecerle lo que ha hecho por nosotros. Con él hemos ganado una Liga de forma espectacular. Hemos intentando ayudarle con el objetivo de que las cosas salieran bien, pero hay rachas positivas y negativas y desgraciadamente se ha tomado esta decisión. A nivel personal, y por parte de todos los empleados del club, le doy las gracias. Hemos disfrutado con él".

Por último, Mijatovic dejó caer que espera no arrepentirse del paso adoptado: "Estoy convencido de que hemos tomado la decisión acertada prescindiendo de Schuster y elegir a Juande Ramos como sustituto. La temporada es muy larga y aún no hay nada decidido. Vamos a trabajar para conseguir los objetivos fijados", concluyó la última barrera que le queda a Ramón Calderón antes de que le apunten a él.

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