Ronaldinho, contra las drogas

El Gobierno Federal brasileño tenía muy claro que el blaugrana era la mejor baza para hacer esta campaña

Ronaldinho está comprometido con la sociedad de su país y por eso ha prestado su imagen para la nueva campaña de prevención contra el uso indebido de drogas del Gobierno brasileño. Bajo el lema 'Diga Sí a la Vida', este ambicioso proyecto cuenta con el apoyo de órganos públicos, como el Ministerio de Educación y de la Secretaría Nacional Antidrogas, y privados, que han unido esfuerzos para concienciar sobre todo al público infantil y juvenil.

El proyecto será presentado en público por el propio presidente brasileño, Luiz Inacio 'Lula' da Silva hoy en un acto solemne que tendrá lugar en el Palacio del Planalto, en Brasilia, y que servirá a su vez para abrir oficialmente los actos de la VIII Semana Nacional Antidrogas. Lula ya ha manifestado su satisfacción por poder contar con la participación de Ronaldinho en esta iniciativa que intenta prevenir a los más jóvenes sobre el peligro de las drogas.

La popularidad del mejor jugador del mundo, que es el ídolo indiscutible para millones de niños y niñas en su país, junto a su imagen, que siempre ha ido asociada a valores como salud, dedicación y disciplina, han sido argumentos más que convincentes para que el Gobierno brasileño haya decidido apostar por Ronaldinho para este proyecto que será implementado en todo el territorio del país.

Dado que la actuación del blaugrana va orientada al público infantil, los promotores de la campaña consideraron que la imagen más eficaz de Ronaldinho sería la que aparece en los cómics de la 'Turma da Mónica' del dibujante Maurico de Sousa. "La decisión de convertir a Ronaldinho en un personaje de cómic refuerza la necesidad de mantener vivo en el imaginario del niño la importancia de hacer elecciones saludables, de preservar y valorizar la vida, aunque las condiciones de vida no sean favorables", han indicado fuentes gubernamentales.

El carisma de Ronaldinho entre los más pequeños se convertirá en una eficaz arma para evitar que los jóvenes brasileños caigan en la lacra de la droga.