Malcom arrancó con energía pero acabó diluyéndose

Malcom tuvo su oportunidad pero no acabó por aprovecharla

Malcom tuvo su oportunidad pero no acabó por aprovecharla / VALENTI ENRICH

Ramon Palomar

Ramon Palomar

La primera experiencia como titular de Malcom de Oliveira le duró exactamente 56 minutos. El brasileño tuvo un comienzo fulgurante, como el equipo, pero poco a poco se fue diluyendo, para acabar decidiendo que Munir le sustituyera a poco del inicio de la segunda mitad con el 0-2. Un debut esperanzador, pero no fue el jugador desequilibrante, al estilo de Dembelé. Veremos qué decide Valverde de cara al futuro.

Malcom de Oliveira recibía, al fin, la gran oportunidad de debutar como titular en el Barça tras dejar Ernesto Valverde fuera al delantero francés. Y lo cierto es que el brasileño, consciente de que era su momento después de muchas semanas en el ostracismo, quiso tener protagonismo desde el primer minuto.

De hecho, las primeras acciones ofensivas de un Barça que salió con muchas ganas, llegaron por la banda izquierda donde se encontraba el brasileño, que quería dar muestra de su calidad y capacidad de desborde desde el primer minuto.

Protagonista al inicio

Y no tardó en demostrarlo. Antes de cumplirse el primer minuto de juego, recibió un balón en largo y su centro no lo pudo concretar Messi, que se le fue arriba. Muy activo en la banda, Mandi se encargaba de cerrarlo. Y Malcom trató de seguir siendo incisivo en esos primeros minutos, y efectuó su primer chut a portería, a los cinco minutos, sin consecuencias.

Trataba de crear juego por la banda, aunque no se atrevía a realizar una jugada personal de desborde, algo que Dembelé, que lo seguía desde la banda, era mucho más aficionado. Sea por que no se atrevía, o prefería servir balones a sus compañeros, el caso es que Malcom trataba siempre de buscar el centro.

Aunque, poco a poco, los balones empezaron a escasear en la zona ofensiva después del primer gol de Júnior, y sus acciones se limitaron a tratar de meterse entre líneas, buscando un pase ‘milagroso’ de Messi, que nunca llegó en condiciones.

Sin espacio ni ocasiones

Los centrocampistas no encontraban buenos espacios para los delanteros ni menos para Malcom, que poco a poco se fue diluyendo, ante la falta de espacios, con un Betis que cerraba muy bien en el centro del campo y no permitía desplazamientos largos al brasileño.

Su aportación acabó siendo discreta, y como encargado de lanzar dos saques de esquina, pero ya no pudo tener protagonismo, a excepción de un uno contra uno ante Bartra, al que no se atrevió a encarar. Quizá le faltó un poco de decisión en esas acciones.

Con el sorpresivo 0-2 de Joaquín, no mejoró sus prestaciones, y poco a poco se fue desdibujando, al igual que Suárez y Leo Messi, que no encontraba los pases profundos, ni tan siquiera con las subidas de Jordi Alba, bien taponado.

Munir por Malcom

Con el partido atascado, Ernesto Valverde decidió que sacar del campo a Arthur y Malcolm seguía en el campo. Tendría más oportunidades de demostrar al técnico que puede contar con él.

Pero no tuvo muchos minutos más. A pesar de intentar lanzar alguna diagonal, no encontró su espacio, y Valverde decidió cambiar de delantero, dando entrada a Munir, y dejando espacio en la banda para las subidas de Alba.

Malcom se retiró entre aplausos del público que premió su esfuerzo como titular, pero no fue suficiente para ser determinante en la zona ofensiva blaugrana y tampoco despejó dudas sobre si debe ser él o Dembelé el que ocupe esa posición en la banda.