Historia SPORT

Historia SPORT

Dodi Lukébakio: Su ídolo es Jesucristo y el Pizjuán se rinde a él tras sus dos milagros

En apenas cuatro partidos, el delantero se ha ganado a la afición con un latigazo y un auténtica obra de arte

Llegó a Nervión este verano, procedente del Hertha de Berlín, a cambio de 9 millones de euros fijos y tres en variables

Sevilla - Almería: El gol de Lukebakio

Adrià Fernández

Adrià Fernández

El Sevilla siempre ha protagonizado varios de los fichajes sorpresa temporada tras temporada. Bajo la dirección de Monchi, jugadores como Alves, Baptista, Kanoute, Luis Fabiano, Rakitic, Gameiro; o más recientemente Krychowiak, Ben Yedder, Koundé, En-Nesyri, Diego Carlos o Bono. Ahora, con Víctor Orta en el cargo, el primer ‘pelotazo’ podría ser el de Dodi Lukébakio.

Llegó procedente del Hertha de Berlín (donde estuvo tres temporadas y media) a cambio de 9 millones de euros fijos y tres en variables. Fue una de las sensaciones de la Bundesliga el curso pasado y le valió un billete hacia la capital andaluza.

Un trotamundos

Previamente, Lukébakio se había formado en las categorías inferiores del Anderlecht, tuvo un breve paso por el Toulouse y el Watford antes de hacer carrera en tierras germanas, empezando por el Fortuna Düsseldorf y medio curso en el Wolfsburgo.

Nacido en Asse -una población muy cercana a Bruselas-, llegó a debutar con la selección absoluta de la República Democrática del Congo con 19 años, aunque meses después recibió la llamada de las selecciones inferiores del combinado belga. Ahora encadena tres convocatorias consecutivas con la selección absoluta.

Nuevo ídolo

Su carta de presentación ante los hispalenses llegó hace diez días en su debut contra Las Palmas. Tan solo necesitó media hora de juego para cazar un balón en el área y, con un latigazo, anotar el único tanto del encuentro, que supuso el primer triunfo del Sevilla en Liga.

Frente al Almería, en la pasada jornada liguera, Lukébakio anotó el que será uno de los goles de la temporada. Una obra de arte, directa al museo. Pescó un cuero en el balcón del área y con dos recortes se deshizo de cinco marcas para teledirigir su disparo a la escuadra. Aquí les dejamos el enlace al gol en cuestión.

Partiendo desde la banda izquierda del ataque se ha convertido en todo un dolor de muelas para sus rivales: velocidad, explosividad, regate y gol. En Sevilla ya le empiezan a apodar como el ‘Konoplyanka de ébano’.

Ahora bien, preguntado por sus ídolos de la infancia, respondió tener “referentes, no ídolos. Mi único ídolo es Jesucristo” y ya personificándolo en figuras más terrenales, respondió que “veía mucho a Ronaldinho de niño y cuando crecí, a Cristiano Ronaldo también”. Mañana tendrá una prueba de fuego de nivel ante un rival que irá vestido de blaugrana.