'Salid y disfrutad'

Messi espera vivir una noche europea mágica

Messi espera vivir una noche europea mágica / JOAN MONFORT

Dídac Peyret

Dídac Peyret

"No me siento bien en el campo, no estoy disfrutando. Pensar demasiado me hace daño. Me encierro. No me permito sacar la frustración que tengo. Y lo que hago es no hablar con nadie. Es como si me sintiera avergonzado”.

La desgarradora confesión de André Gomes recordaba estos días una verdad socavada en el mundo del fútbol. Los campeones también libran una lucha diaria con sus inseguridades, temores y demonios

El miedo a perder. El miedo a no cumplir con las expectativas. El hartazgo de la competición. O el cruel escrutinio al que se ven sometidos forman parte del mapa mental de un futbolista. 

Lo transgresor, en el caso del portugués, no fue el contenido de sus palabras, sino la valentía de contarlo al mundo. Hoy seguro que los 22 futbolistas que salgan al campo deberán lidiar con emociones encontradas. La motivación de jugar uno de los partidos del año, pero también el inevitable vértigo al fracaso.

Ayer Valverde hizo suya una de las máximas de Cruyff para encarar de la mejor forma posible la presión del encuentro. “Es un partido para disfrutar”

Así lo entiende también la afición, que tiene claro que este es uno de esos partidos. Es un Barça-Chelsea. Es un clásico de la Champions. Una oportunidad para ser feliz. Porque la gente que es futbolera sabe que este tipo de encuentros, cuando tienen un final feliz, tienen un poder curativo asombroso. Merece la pena coger un tren tan peligroso como este. A pesar de que augure sobresaltos. Aunque se convierta en un viaje desolador. 

El conjunto azulgrana también deberá lidiar contra sus propios fantasmas. El Barça, pese a contar con el mejor jugador de la historia, ha ganado una Champions de las últimas seis.

Enfrente, además, tendrá un hueso. Un Chelsea que poco a poco se ha ido labrando una identidad contrapuesta a la del Barça. La alegría de juego azulgrana contrasta con el sentido mezquino del conjunto blue; cada error es una oportunidad para hacer daño al adversario. Se impone el repliegue. 

De las seis eliminatorias en las que se han cruzado en la Champions, el Barça ha ganado cuatro y ha cedido en dos ocasiones. Las dos últimas veces que los azulgranas han eliminado al Chelsea, han levantado la Orejuda.

El encuentro de la ida (1-1) da algunas pistas de lo que se podría ver hoy (20.45/ beIN SPORT) en el Camp Nou. El conjunto de Conte tiene claro que sus opciones de seguir en Europa pasan por jugar el mejor partido de la temporada.

“Tenemos que hacer un partido perfecto para pasar. Un partido perfecto con balón. Y un partido perfecto sin balón”, admitió ayer Willian, un infierno para la defensa azulgrana en Stamford Bridge”.

de Iniesta a pirlo

Los dos equipos están pendientes de Iniesta. El centrocampista marca la identidad del Barça. Lo tiene claro Conte, que ayer le dedicó encendidos elogios. “Es un genio del fútbol. A mí me gusta compararlo con Andrea Pirlo. Estamos hablando de que Iniesta es un genio”.

El de Fuentealbilla está por la labor de asumir riesgos y entrar en el once. Lo necesitará el Barça para llevar a cabo el plan que ayer dejó entrever Busquets para superar a los ingleses. “Aunque nos valga el 0-0, no somos de especular, más bien lo contrario. Y a quien especula le sale mal la jugada”.  

En el vestuario tienen claro el encuentro que les espera. Nadie lo explicó mejor que Rakitic en Londres: “por momentos parecía un partido de balonmano”.

Hoy el Camp Nou disfrutará del enésimo partido del siglo (seguro que vendrán más). Uno de esos encuentros que se viven desde primera hora de la mañana entre la mayor de las esperanzas y el temor de un revés insoportable