Tercera visita de Djordjevic al Palau como entrenador

‘Sasa’ dirige a un Fenerbahçe herido de muerte tras su derrota del miércoles ante el Baskonia

Nacho Rodríguez lo ‘echó’ del Palau en 2000 tras ganar la liga con el Madrid y provocar al público

Djordjevic se granjeó muchos enemigos en el Palau

Djordjevic se granjeó muchos enemigos en el Palau / VALENTÍ ENRICH

David Rubio

David Rubio

El 5 de junio de 2000, el Real Madrid conquistó el título liguero en el Palau al imponerse por 73-82 en el Palau al Barça de Aíto García Reneses en el quinto partido de la gran final.

A las órdenes del actual seleccionador español Sergio Scariolo, el cuadro blanco celebró la victoria sobre la pista y a buen seguro Aleksandar Djordjevic lo hizo con demasiada vehemencia en una mezcla de rabia contenida y ansia de venganza que provocó una pitada monumental y una furibunda reacción de Nacho Rodríguez.

El malagueño, exmánager deportivo de la sección hasta que lo sustituyese Juan Carlos Navarro con la llegada de la Junta de Joan Laporta, se erigió en portavoz del barcelonismo y echó con violencia a su antiguo amigo de la pista mientras el serbio levantaba su brazo tan amenazante como ejecutor.

Pancarta de muy mal gusto contra Djordjevic

Pancarta de muy mal gusto contra Djordjevic / SPORT.ES

Tras fracasar en la NBA (solo disputó ocho partidos en los Blazers con 3,1 puntos de media), Sasa Djordjevic llegó al Barça a finales de 1996 y enseguida se convirtió en un ídolo para el Palau.

Después de colaborar de manera decisiva a la conquista de los títulos ligueros y de una Copa Korac, el club azulgrana le comunicó en el verano de 1999 que no contaba con él y acabó fichando por el Real Madrid. El error fue monumental, ya que no tenía sustituto y se acabó fichando al estadounidense Andrew Goldwire.

Dos precedentes

Y en esa primera temporada incendió el Palau en el quinto encuentro de la final. Después de salir del cuadro blanco en 2002 y de colgar las zapatillas en 2005 en el Olimpia Milano, el de Belgrado volvió dos veces al Palau.

Djordjevic y Jasikevicius, en un clásico en 2001

Djordjevic y Jasikevicius, en un clásico en 2001 / EFE

El 2 de febrero de 2006 y nada más asumir el banquillo del cuadro lombardo ganó en el feudo blaugrana por 75-77, aunque terminó cayendo eliminado en la fase de grupos de la Euroliga. Una década más tarde, el 29 de octubre de 2015 cayó con rotundidad por 77-52 como entrenador del Panathinaikos

Situación crítica

Entre la eliminación de los tres equipos rusos con las consiguientes modificaciones en la clasificación y el KO del martes en la pista del renacido Bitci Baskonia (77-62), Djordjevic regresa este viernes al Palau como míster del Fenerbahçe (21.00 horas). Los turcos llegan con el agua al cuello en la Euroliga y un lamentable balance de 9-14. 

Y es que mientras el Barça buscará dejar casi sellada la primera plaza, el club de la parte asiática de Estambul podría quedar fuera de cuartos si pierde en el Palau. Situación muy delicada la del técnico serbio, quien no está consiguiendo ni por asomo en los banquillos sus enormes logros como jugador.

Sin la importantísima baja por lesión del francés Nando de Colo, los dos grandes referentes del rival del Barça son sin duda el pívot checo Jan Vesely (ha estado varias veces en la agenda azulgrana) y el exterior serbio Marko Guduric.