El RACC pide cambios en las restricciones de tránsito de Barcelona

El RACC ha presentado a la Generalitat de Catalunya un documento que incluye un seguido de cambios y propuestas a las medidas para mejorar la calidad del aire aprobadas durante los últimos meses. Estas propuestas son el fruto de charlas con los Ayuntamientos y de opiniones de muchos de los socios del organismo, además de un estudio realizado por expertos de la Fundación RACC. Así, se han analizado esas medidas anunciadas por la Generalitat y por el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y se ha puesto sobre la mesa si cumplen su principal función, contemplando diferentes restricciones de circulación para turismos y para aquellas furgonetas más antiguas.

El RACC considera que se deben tomar medidas para mejorar la calidad del aire de la zona de Barcelona y que, para lograrlo, se deberían eliminar los vehículos más contaminantes de manera progresiva y coordinada. Para llegar a este punto, defienden un seguido de actuaciones que se deberían llevar a cabo para conseguir el objetivo, así como los resultados esperados.

Aplicación progresiva, homogénea y coordinada de las restricciones. El RACC apunta a que hay un desajuste entre el programa de medidas estructurales de la Generalitat y el del AMB y que, de esta manera, se genera confusión entre los usuarios. Además, opina que no se ha especificado si habrá vehículos o usuarios exentos a la normativa.

Para ello, se pretende establecer una sola normativa, llevar a cabo una ampliación de la red de puntos de medida de la calidad del aire i rigor en estas medidas, ampliar el periodo de adaptación, incorporar vehículos pesados, establecer una limitación horaria de las restricciones y establecer excepciones, también.

Compensaciones y regulación económica. El cambio a vehículos 'limpios' puede suponer un coste para los usuarios. Por ello, el RACC pide un sistema compensatorio estable y la implantación de ventajas impositivas que beneficien a quien menos contamina.

Por lo que busca una inversión del nuevo impuesto de CO2 en ayudas para la renovación del parque, establecer las tarifas de aparcamiento regulado en función de las emisiones, desincentivar el consumo de diésel y vincular el impuesto de circulación a las emisiones.

Mejora del transporte público y de las infraestructuras de transporte. Las congestiones que se forman en los corredores de acceso a Barcelona no contribuyen nada a la mejora de la calidad del aire. Esta situación sucede por la gran cantidad de vehículos privados que circulan y que, a su vez, son consecuencia de la falta de competitividad del transporte público.

El RACC pretende, pues, mejorar la red de Rodalies, potenciar los Park&Ride de las estaciones de ferrocarril metropolitanas, implantar carriles Bus-VAO de bajo coste e instalar señalización de velocidad variable.