8 motivos para ir en bicicleta

No es un secreto. El deporte aporta a las personas gran cantidad de beneficios, tanto físicos como mentales. Entre los primeros, encontramos la tonificación de los músculos, la mejora del riesgo sanguíneo o la eliminación de grasa. Entre los segundos, encontramos la superación de uno mismo, la reducción del estrés y la mejora de la autoestima. El ciclismo en concreto, y de la misma manera que el deporte en general, también produce dichas mejoras en la salud y el bien estar de las personas.

De hecho, tan solo diez minutos de bici al día son suficientes para notar dichas mejoras físicas en articulaciones, músculos y sistema circulatorio. Si aumentamos ese tiempo a veinte minutos, se fortalece el sistema inmunológico; y si lo aumentamos a treinta, se mejora la función cardíaca. Por último, si el tiempo que dedicamos al día a la bici es de cincuenta minutos, podremos reducir el metabolismo de nuestro cuerpo; y si llegamos a la hora de ejercicio, además, bajaremos notablemente nuestro peso. Y, ¿aún te preguntas porqué ir en bici? Desde Motor Zeta, con la ayuda de la Dirección General de Tráfico (DGT), te ayudamos a recordar las ocho razones definitivas que te convencerán para apuntarte al ciclismo.

Obesidad y sobrepeso. Ir en bici estimula el metabolismo de nuestro cuerpo y quema calorías, por lo que es ideal para distanciarte definitivamente de la obesidad y el sobrepeso.

Dolores de espalda y columna. El pedaleo estimula los músculos, y especialmente la zona lumbar y los pequeños músculos de las vértebras, así que se convierte en un hábito eficaz contra el dolor de espalda.

Colesterol. El ejercicio también incrementa la producción del colesterol HDL (colesterol bueno) y reduce la presencia del LDL (colesterol malo), el responsable del endurecimiento de las arterias y vasos sanguíneos.

Hipertensión. Montar en bici reduce o previene la hipertensión, que constituye el mayor riesgo de sufrir ataques al corazón.

Varices. El ciclismo también ayuda a mejorar la circulación, por lo que previene la aparición de las varices.

Estrés, depresión, ansiedad... Tal y como hemos explicado al inicio del artículo, el deporte también tiene efectos positivos en nuestra mente. Y el ciclismo no iba a ser menos. Ir en bici estimula la producción de hormonas, por lo que se reduce el riesgo de sufrir depresión y ansiedad. Además, el movimiento cíclico y uniforme del pedaleo produce estabilidad física y emocional, reduciendo en gran medida el estrés.

Riesgo cardiovascular. Cualquier actividad física regular reduce el riesgo de sufrir un ataque de corazón en más del 50%.

Diabetes. El uso habitual de la bici disminuye hasta un 40% el riesgo de desarrollar diabetes de tipo 2.