La final espera a la selección española sub-17

La selección espera celebrar una nueva victoria

La selección espera celebrar una nueva victoria / EFE

Josep Capdevila

Josep Capdevila

En el año 1991, la selección española sub-17 llegaba a la final del Mundial disputado en Italia por primera vez en su historia y la perdía por 1-0 ante Ghana. En el 2003, una selección en la que ya destacaba un joven Cesc Fàbregas conseguía llegar a la final del Mundial que se disputaba en Finlandia. La perdió ante Brasil por 1-0. En el 2007, la selección, en la que sobresalía un delantero goleador llamado Bojan Krkic, también conseguía llegar a la final y la perdía en los penaltis ante Nigeria.

Tres intentos, los tres fallidos. Hoy, 10 años después, España tiene de nuevo la oportunidad de clasificarse para la final del Mundial sub-17 y no solo espera conseguirlo sino que, además, confía en después romper el maleficio y, por primera vez en la historia, ser campeón del mundo de la categoría.

España ha hecho un buen Mundial pero superar a Mali (16.30 hora española en directo por Gol y Eurosport) no será nada fácil. Después de perder el primer partido del Mundial contra Brasil, la selección de Santi Dénia ha ido a más y ha llegado a la final con solvencia. Para conseguirlo, han sido claves cuatro barcelonistas. Mateu Jaume y Juan Miranda han sido piezas claves en la defensa y Sergio Gómez y Abel Ruiz han aportado la fluidez ofensiva y, especialmente, los goles. Los cuatro deben ser este miércoles titulares. A su lado tendrán otros hombres importantes. Los madridistas Moha y Gelabert dan consistencia al centro del campo y el extremo valencianista Ferran Torres, pretendido ya por Barça y Madrid, aporta desequilibrio en ataque.

Pero Mali no será ninguna perita en dulce. Hoy por hoy es el mejor equipo africano. Es un equipo potente y, especialmente, muy fuerte físicamente. Si ven el partido, fíjense especialmente en tres de sus jugadores. Salam Dijou (dorsal 10) es un futbolista “tipo” europeo, habilidoso, con un buen pase y que se asocia muy bien con el delantero centro N’Diaye (19), un jugador fuerte, que juega muy bien de espaldas a la portería y que aguanta bien el balón esperando la llegada de los hombres de segunda línea. Y el tercer peligro es Djemoussa Traore (3), un lateral izquierdo muy ofensivo y que será un dolor de cabeza para el barcelonista Mateu Jaume.

Si algo destaca de Mali es el desorden táctico del equipo, algo que en lugar de ser un handicap es una gran virtud. Eso si, técnicamente es un equipo bastante flojo.

Cuando los dos equipos salten al Dr. Dy Patil Stadium de Mumbai ya conocerán el nombre del otro finalista. Porque a partir de las 13.30 (hora española) se habrán enfrentado Brasil e Inglaterra. Un duelo muy igualado y en el que puede pesar mucho la baja en Inglaterra de Jadon Sancho, “repescado” por el Borussia a medio campeonato.