Joao Félix, ante su pasado

No está pasando por su mejor momento Joao Félix. Su, de momento, breve historia en el FC Barcelona tiene muchas aristas, pero un cénit muy destacado: la visita de su exequipo, el Atlético de Madrid, el pasado mes de diciembre.

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Fue una 'vendetta' en toda regla. Pocas veces se había visto a un jugador cedido tenerle tantas 'ganas' al club que, a fin de cuentas, sigue teniendo sus derechos y al que debe volver a final de temporada si no se llega antes a un nuevo acuerdo entre clubes.

Xavi y la cláusula del miedo

De momento, materializará el regreso este domingo (21.00 horas), pero vestido de azulgrana. El Atlético de Madrid no impuso cláusula del miedo y lo pagó muy caro. Incluso Xavi recordó este ejemplo cuando al egarense se le cuestionó por haber introducido en su caso el Barça este tipo de cláusulas con sus cedidos. "Mirad lo que le ha pasado al Atlético con Joao Félix", se defendió.

Y es cierto. Porque Joao Félix no solo marcó el gol de la victoria el pasado mes de diciembre en Montjuïc frente a los colchoneros, sino que se marcó un gran partido, y por si fuera poco, lo festejó subido a una de las vallas del estadio en una imagen icónica.

Hubo tensión con sus excompañeros, en especial con José María Jiménez, de sangre caliente. "¿Quieres pelear o qué?", le espetó el uruguayo después de que Joao Félix se quejara de una entrada.

Si ya se marchó del Atlético siendo poco querido con la afición tras una pasada temporada complicada, la hostilidad que se espera puede ser considerable.

La hostilidad que espera

En la primera vuelta, su entrenador, Diego Pablo Simeone, no entró al trapo, pero está por ver si ahora sigue una estrategia distinta, pues no le funcionó.

Es cierto que Joao Félix ya no es el futbolista del que hablaba maravillas Xavi, que hay partidos en los que prácticamente pasa desapercibido y que, sin ir más lejos, en Nápoles fue suplente después de una muy floja y decepcionante actuación ante el Mallorca.

Pero la intención de llegar a un acuerdo y ampliar su cesión para la próxima campaña se mantiene. A buen seguro que Xavi lo verá entrenarse esta semana más enchufado que nunca y que puede ser su reencuentro con el buen fútbol por la puerta grande. Porque calidad tiene de sobras. Y motivación, ante sus ex, no le faltará.