Inglaterra acaba con la imbatibilidad de Bélgica y le roba el liderato

Trippier felicitando a Mount por su gol

Trippier felicitando a Mount por su gol / AFP

Roger Payró

Casi dos años después Bélgica volvió a perder un partido. Inglaterra fue el verdugo de la selección número 1 en el ranking FIFA en un partido donde sin excesivo brillo consiguió su objetivo. Victoria y liderato del grupo de la Nations League. Lo perdió el cuadro de Roberto Martínez, a pesar de que se adelantó con un penalti de Lukaku. Rashford, también desde los once metros, y Mount, con algo fortuna, dejaron sin sumar a Bélgica. No lo hacía desde un 5-2 ante Suiza el 18 de noviembre de 2018, partido que le costó la eliminación de la competición.

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Nations League

2
1
Alineaciones
Inglaterra
Pickford; Walker, Maguire, Dier; Alexander-Arnold (Reece James, 79'), Mount (Sancho, 89'), Rice, Henderson (Philips, 65'), Trippier; Calvert-Lewin (Kane, 65') y Rashford.
Bélgica
Mignolet; Alderweireld, Denayer, Boyata; Meunier, Witsel, Tielemans, Castagne; De Bruyne (Verschaeren, 73'), Lukaku y Carrasco (Doku, 83').

La primera media hora fue de claro dominio rojo. Las ausencias de Courtois, Mertens y los hermanos Hazard no parecían lastrar al combinado belga, que se adueñó de Wembley. Ambos técnicos apostaron por una línea de tres atrás y ese contexto favorecía el fútbol ofensivo. Los ‘Diablos Rojos’ lo aprovecharon y castigaron una vez tras otra la espalda de Trippier, hoy como carrilero zurdo. Dier, central ubicado en el flanco izquierdo, le tocó bailar con las más feas.

Partido para el olvido el del futbolista ‘spur’. Suyo fue el derribo que costó el gol de Bélgica después de que Lukaku lo superara por velocidad. El propio delantero del Inter ejecutó el lanzamiento. Se había librado pocos minutos antes Inglaterra ya que el tanto de Carrasco fue anulado por fuera de juego de Castagne, que se cruzó en la trayectoria del disparo y despistó a Pickford.

El gol no cambió el plan de los de Roberto Martínez. De Bruyne perdonó el 0-2 tras una pérdida inglesa en la salida de balón y Meunier, con un remate poco estético, también anduvo cerca. Y de posible héroe, a villano. El lateral dio vida a los ‘Three Lions’ con un agarrón tan ligero como absurdo sobre Henderson. De los contactos que se cuentan a pares en cada saque de esquina, pero no por ello son menos penalti. Rashford engañó a Mignolet y reiniciaba el partido.

Fue un reset de manual, porque la Bélgica vista hasta entonces desapareció. Y eso que Carrasco la tuvo antes del asueto después de un pase de tacón de Lukaku. Una genialidad válida gracias a que Dier, quién si no, rompía el fuera de juego. El disparo borró todo lo anterior. Muy cruzado, lejos de portería.

En la reanudación el ritmo bajó y ambos jugaron un poco a verlas venir. Y ahí salió victorioso el cuadro de Southgate. No sin suerte, eso sí. Un disparo de Mason Mount fue desviado por Alderweireld cogiendo una parábola letal. A la escuadra. Tocaba remar a contracorriente en la última media hora, pero a Bélgica le costó volver a crear peligro. Carrasco tuvo nuevamente la más clara después de un magnífico balón de De Bruyne, pero la picadita por encima de Pickford careció de precisión.

Kane, que salió de refresco después de llegar al partido entre algodones por una lesión muscular, pudo sentenciar con un testarazo a la salida de un córner. Perdonó lo que no suele. Poco después fue Rashford quien lo probó desde la frontal tras una buena combinación con Rice. Afortunadamente para sus intereses no tuvieron que lamentar los fallos y los tres puntos se quedaron en las islas. En noviembre se volverán a ver las caras, esta vez en territorio belga.