Mundial de MotoGP, premio Valores Acontecimiento Deportivo

Después de un fin de ciclo que dejó atrás muchas polémicas, MotoGP ha recuperado la armonía en la parrilla

Las muestras de respeto y afecto entre el campeón Bagnaia y el resto de favorito son el mejor ejemplo para las jóvenes generaciones

Moto GP, Premio Valores Acontecimiento

Moto GP, Premio Valores Acontecimiento / SPORT.es

Laura López Albiac

Laura López Albiac

Después de una de las temporadas más igualadas de los últimos años, el título de MotoGP se decidió en la última cita del calendario 2022, en Valencia. El italiano Francesco ‘Pecco’ Bagnaia se proclamó campeón frente al francés Fabio Quartararo, mientras que Enea Bastianini le ganó el pulso a Aleix Espargaró por el tercer puesto final. Pero más allá de los resultados deportivos, la imagen que mejor definió este campeonato fue la efusiva felicitación de Quartaro a Bagnaia al cederle la corona. El reflejo indudable del ‘fair play’ que preside actualmente la parrilla.

No fue el único ejemplo. A mitad de curso, cuando Aleix todavía mantenía intactas sus aspiraciones al título y Quartararo lideraba la clasificación, los hijos del piloto catalán visitaban a menudo el box de Yamaha para jugar con Fabio, su vecino en Andorra. Y Bastianini celebraba sus victorias subiendo en brazos a Nadia, su jefa, pero sobre todo, la viuda de Fausto Gresini, el hombre que apostó por él en sus inicios, fallecido por Covid el pasado año. Cada una de estas historias y muchas más en la categoría reina del Mundial sirven de ejemplo a las jóvenes generaciones y demuestran que los valores deben ser siempre lo más importante. En cualquier deporte hay que saber ganar y saber perder.

Carmelo Ezpeleta agradeció el premio de SPORT: “Gracias en nombre de todos los que trabajamos en Dorna. Desde el principio hemos intentado trabajar en la seguridad y en la igualdad de oportunidades. Que se reconozcan estos valores es muy importante”

Cambio de estilo

Lejos han quedado los tiempos de las fuertes rivalidades en MotoGP. Cuando algunos se negaban a estrecharse la mano sino era por la intervención de un rey y otros se desafiaban al límite dentro y fuera de la pista, con cruces de insultos entre ellos y también entre sus respectivas aficiones. Hay quien dice que a Bagnaia y Quartararo les falta la intensidad y el carisma de Rossi en sus viejos duelos con Stoner, Lorenzo o Márquez. Y probablemente sea cierto. Pero nadie puede discutir el talento de los nuevos héroes de MotoGP, que además, casi siempre va acompañado de buen rollo. ¡Y que dure!.