El Arsenal pone la Premier al rojo vivo

Los 'gunners' vencen por 3-1 al Liverpool y se meten de lleno en la lucha por el título

Un error entre Van Dijk y Alisson pusieron en bandeja la victoria del Arsenal

Martinelli puso la magia en el duelo ante el Liverpool

Martinelli puso la magia en el duelo ante el Liverpool / ANDY RAIN

Nil Jaimejuan

Nil Jaimejuan

El Arsenal venció al Liverpool por 3-1 en un partido sentenciado por los 'gunners' tras el error garrafal entre Alisson y Van Dijk que puso en bandeja los tres puntos para los pupilos de Arteta, que se acercan a los reds en la lucha por la primera plaza de la Premier League. Tras esta victoria, tan solo dos puntos separan a los contendientes al título.

El partido arrancaba con un ritmo frenético, un choque de estilos entre el 'rock and roll' del Liverpool de Jurgen Klopp ante la perfecta sintonía coral de Arteta y su Arsenal, que arrancaba el choque controlando la posesión y oteando el horizonte en busca de las primeras oportunidades.

Una llegada en banda de Gabriel Martinelli y posterior centro a Nketiah, delantero que no consiguió conectar bien el remate en dirección portería, fue el primer gran aviso de los 'gunners' a la meta de Alisson, una ocasión a la que Gakpo dio respuesta un minuto después con un disparo raso que rozó el palo.

Fue entonces cuando el Arsenal aprovechó una laguna en la espalda de Van Dijk para abrir la lata en el minuto 13. Havertz falló el uno contra uno pero ahí estaba Bukayo Saka para rematar el balón a portería vacía para enloquecer el Emirates Stadium (1-0). Los locales se apuntaban el primer golpe de un combate que apuntaba a irse a muchos rounds.

El Liverpool resiste y encuentra 'oro'

Los de Jurgen Klopp no se encontraban cómodos en el césped y echaban de menos la creación de juego de hombres como Alexander Arnold, desaparecido en los primeros treinta minutos para los suyos. Las posesiones de los 'reds' morían cuando se acercaban al área rival y la desesperación por una reacción rápida se transformaban en faltas innecesarias.

Sin embargo, la Premier League no perdona ningún despiste y este partido fue otro claro ejemplo. A falta de menos de un minuto para el pitido a vestuarios, el Liverpool aprovechó un error garrafal para igualar la contienda: Saliba y David Raya pecaron de confianza en el área pequeña y Luis Díaz empujó el balón con la 'puntera' con tal suerte de rebotar en Gabriel y colarse entre las mallas. 1-1 y todo por decidirse en la segunda mitad.

Los errores no perdonan

El paso por los vestuarios alteró ciertamente el guion, y era ahora el Liverpool quien se hacía con el ritmo del partido y se asentaba en zonas peligrosas en busca del tanto. Un chut con rosca de Curtis Jones hizo el silencio en el estadio para confirmar las buenas sensaciones, pero más tarde los errores volvían a escena.

Van Dijk y Alisson, en un grotesco fallo de comunicación en la frontal, le regalaron el gol al más listo de la clase, un Martinelli que empujó el balón y marcó el gol que devolvía el liderato a los 'gunners' (2-1) en el minuto 67.

La reaparición de Thiago a los terrenos de juego tras una sequía de 9 meses fue insuficiente para revivir a un Liverpool que veía como Konaté era expulsado en el tramo final, su mejor hombre en defensa. El último clavo en el ataúd de los 'reds' lo puso Trossard con un gol en el 92 tras una jugada mágica. Victoria para el Arsenal por 3-1, que se reenganchan por completo a la carrera por el título.

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