A Xavi se le pone cara de Ferguson

Sin Liga, se ha hablado más de la Kings League de Piqué que del Barça. También de la selección española. Llevamos unos cuantos días con muchos internacionales repartidos por el mundo con sus selecciones. Hemos disfrutado, eso sí, del Barça femenino, que sigue su camino imparable hacia otro título liguero y que se juega seguir vivo en la Women Champions League. Todo cambia a partir de esta semana y los focos volverán a dirigirse hacia la primera plantilla blaugrana, la que dirige Xavi. 

El equipo vuelve poco a poco a la rutina diaria en la Ciutat Esportiva tras unos días de desconexión del fútbol de clubs y lo hace desde el pedestal que le ofrece su privilegiada situación. El Barça regresa con confianza, en un buen estado de forma. Le acompañan los resultados y le acompañan las sensaciones del equipo, circunstancias que permiten trabajar con un tono mucho más positivo y agradecido.

Es cierto que ha habido algún contratiempo en forma de lesiones, como es el caso de Christensen y, antes del parón, de De Jong y Araujo, pero parece ser que, más allá del danés, que estará un mes de baja, no son problemas importantes y Xavi podrá contar con ellos para este final de temporada que arranca en Elche.

Los blaugrana visitan al colista y es en estos campos donde también se deciden los títulos. Todos los partidos son trascendentales, pero uno destaca por encima del resto, la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey y una hipotética final del torneo. El Barça lo tiene todo de cara para pasar ante el Real Madrid y, si se confirma, sería la estocada final para los blancos porque significaría el cuarto clásico consecutivo ganando. Si a ello le suman una buena gestión de la distancia en Liga, la temporada pinta muy bien. 

Seguramente, además, en pocas fechas recuperarán elementos importantes como Dembélé y Pedri y, teniendo el calendario libre de competiciones europeas, el esfuerzo debe recaer en intentar dar el último golpe psicológico y de sensaciones a los de Ancelotti, que deberán agarrarse a la eliminatoria ante el Chelsea en la Champions League. 

En definitiva, y pese a que aún lleva relativamente poco en el cargo, la confianza en Xavi por parte del barcelonismo es máxima. En ese sentido, estoy convencido de que el técnico ha aprovechado para empezar a planificar el futuro del equipo de cara al próximo verano.

Xavi se ha ganado, por resultados y liderazgo, poder decidirlo todo alrededor de la plantilla y muchos otros aspectos del día a día, como la alimentación, el tema psicológico, los servicios médicos o incluso el fútbol base. Da la sensación de que se está convirtiendo en el Ferguson blaugrana. Por ilusión, trabajo y constancia, su proyecto apunta a ser largo.