Victoria épica del Barça en Badalona

Mirotic fue el guía de la remontada en el tercer cuarto

Mirotic fue el guía de la remontada en el tercer cuarto / FCB

Nacho Solozabal

Nacho Solozabal

Un duelo sin concesiones. Una parte para cada equipo. La Penya salió al choque mucho más motivada e intensa. Sus jugadores se habían confabulado para igualar la habitual dureza blaugrana. Lo consiguieron, y ello les permitió llevar la iniciativa hasta el descanso. Por su parte, el Barça parecía volver a las andadas. Una cierta pasividad en su juego, y puede que no la mentalidad necesaria para afrontar un partido de estas características.

Los errores, por ambos bandos, se encadenaron de manera desesperante. Parecía imposible que pudieran llegar a fallar tantos tiros fáciles y perder un sinfín de balones absurdos. Pero la escasez de calidad se compensaba con una incertidumbre evidente. Hasta que en el segundo cuarto el Joventut dio un estirón en el marcador.

El Barça en este periodo no sumó su primera canasta hasta el minuto cinco, mientras que su rival subió su intensidad defensiva, robó bolas y corrió al contrataque. El Barça pudo dar gracias de que la Penya sólo hiciera un 1 de 8 en triples al descaso, ya que sino el correctivo hubiera sido mayor. No obstante, la imagen de Saras camino del vestuario aplaudiendo a sus hombres fue una premonición de lo que ocurrió más tarde.

El Barça pone la directa a la final

El descanso le vino muy bien al Barça. Empezó con un parcial de 6-0 aunque luego perdiera tres posesiones de manera consecutiva. Pero, como mínimo, los blaugranas lograron entrar en el partido. Además, el Barça ya era tan agresivo como la Penya, algo que fue determinante en el resultado final.

El duelo seguía siendo horrible, pero la agresividad iba en aumento conforme se acercaba el final. Empezaron a tomar protagonismo la pareja Higgins- Mirotic, y por parte verdinegra un inconmensurable Tomic con la ayuda de un motivado Willis.

El Joventut siguió con sus cambios defensivos, y los de Saras se centraron en ir como posesos al rebote ofensivo. En el tercer cuarto, el Barça sumó 21 puntos, dos más de los que había logrado al descanso, y empezó a dominar el ritmo de juego. El definitivo periodo también fue de locura. De la mano del triángulo Mirotic-Calathes-Higgins pareció que los blaugranas finiquitaban el encuentro.

Pero la aparición estelar de Willis con seis puntos consecutivos, y los errores blaugranas en los tiros libres, le pusieron emoción hasta el último segundo. Gran actuación del Barça en Badalona. No es nada fácil ganar dos encuentros seguidos lejos del Palau. Y hacerlo sabiendo sufrir. Una reacción, tras la derrota en el segundo choque, que prepara al equipo para la gran final.