El PSG puede ser la tumba de Zidane

Zinedine Zidane se está quedanso sin crédito. ¿Le acabará hundiendo el PSG?

Zinedine Zidane se está quedanso sin crédito. ¿Le acabará hundiendo el PSG? / AFP

Lluís Mascaró

Cuando el Madrid humilló al Barça en la Supercopa de España con un marcador global de 5-1, el miedo se instaló en el corazón de todos los culés. Los blancos, que venían de ganar Liga y Champions, iniciaban la campaña arrasando a un conjunto blaugrana hundido psicológicamente tras la huida de Neymar. Y la caverna mediática madridista empezó con su propaganda: este Madrid ya era el mejor equipo de la historia. Solo cuatro meses y medio después, la realidad futbolística de Madrid y Barça ha cambiado tanto que ya ningún culé se acuerda de aquel verano de pesadilla.

Y es que la transformación de ambos equipos ha sido brutal. El Barça se ha agigantado al mismo tiempo que el Madrid se ha empequeñecido hasta límites ridículos. Los blancos están a 19 puntos de los blaugranas en la Liga, después de haber perdido ya tres partidos en el Bernabéu. Entre ellos, el clásico del 23 de diciembre (0-3). Una sangría que ha puesto en evidencia el fracaso de la gestión deportiva de Florentino Pérez: mantener a las vacas sagradas (CristianoBale Benzema) a pesar de su pésimo rendimiento.

El Barça, con la Liga casi ganada, puede soñar con el triplete

El Barça, desde el correctivo del mes de agosto, encadena 29 partidos sin ninguna derrota en las tres grandes competiciones (Liga, Champions y Copa). Los blaugranas han ganado 23 encuentros y han empatado solo 6.  Invencibles y lanzados hacia la gloria. Con la Liga ganada al final de la primera vuelta, el equipo de Valverde puede centrarse en la Copa y, sobre todo, la Champions. Y soñar con un nuevo triplete histórico.

Nada que ver con la situación del Madrid. Los blancos han dicho adiós a la Liga y en la Champions se lo juegan todo ante el PSG de NeymarCavani Mbappé. Una eliminación ante el poderosísimo equipo francés podría significar un terremoto de consecuencias imprevisibles. Ni siquiera Zidane, a pesar de haber conquistado dos Copas de Europa consecutivas, está a salvo de las iras de un madridismo de corta memoria. La misma Champions que llevó a la gloria al técnico galo puede ser su tumba.