Partido a vida o muerte para Argentina

Aires de final en Nizhny Novgorod, el escenario del segundo partido de Argentina en el Mundial y que puede servir para confirmar la recuperación del combinado de Jorge Sampaoli o para alimentar aún más las dudas que ofreció en su debut ante  Islandia: tanto el seleccionador como los jugadores de la albiceleste saben que un tropiezo ante Croacia les dejaría al borde del abimo y a un paso de una eliminación que sería traumática para todo un país. 

Para evitarlo, Sampaoli ha trazado una estrategia que de desdobla en dos caminos: de un lado, proteger y cuidar a Messi, el gran argumento ofensivo de la selección y el jugador más determinante del equipo, frente a las críticas que recibió de algunos sectores tras errar el penalti ante Islandia.

Y de otro, retocar el once inicial para darle un matiz más ofensivo, con jugadores que tengan mejor pie y con más desborde en el uno contra uno, caso de Pavón, el extremo de Boca que llega en buen estado de forma y que ocupará el lugar de Di María, especialmente gris ante Islandia.

También entrará en el equipo Acuña, para ocupar el lugar de un muy discutido Biglia, mientras que Mercado sustituirá a Rojo en defensa, presumiblemente con la idea de frenar a los potentes jugadores del ataque croata. 

El juego aéreo y el balón parado, facetas en las que los croatas destacan especialmente, pueden acabar por decantar el partido, por lo que Sampaoli ha hecho especial hincapié en estas cuestiones durante la preparación del partido.

Messi, enchufado

Messi, por su parte, afronta el partido absolutamente convencido de las posibilidades de su equipo de progresar en el torneo pese a la mala imagen ofrecida en el debut. Poco a poco, Leo ha digerido el mal sabor de boca que le dejó el resultado y el penalti fallado y saldrá absolutamente enchufado ante Croacia para salvar el honor de Argentina y demostrar que es el mejor futbolista del mundo.

Enfrente tendrá a un compañero en el Barça, Ivan Rakitic, que ayer le defendió en rueda de prensa. “La sensación que tengo, no es que tiene ganas, sino lo siguiente. Siempre cuando va a la selección se le ve una alegría especial en la cara. No hay hombre más orgulloso en toda Argentina de poder llevar a su equipo y país al campo. Eso se nota y se ve si está al cien por cien”, dijo el croata del Barça.