Jorge Martín celebra su récord de 'pole' en Malasia

El piloto madrileño apaliza a los favoritos en Sepang

Los primeros del Mundial arrancarán desde la zona media de la parrilla

Jorge Martín

Jorge Martín

Emilio Pérez de Rozas

Emilio Pérez de Rozas

Los tres candidatos al título (09.00 horas, DAZN) del Mundial de MotoGP, el italiano ‘Pecco’ Bagnaia (Ducati), el francés Fabio Quartararo (Yamaha, a 14 puntos) y el catalán Aleix Espargaró (Aprilia, a 27 puntos) perdieron el control de sus motos y de su pilotaje, se fueron al suelo, en uno u otro momento, de la jornada decisiva del Gran Premio de Malasia y arrancarán desde la zona media de la parrilla, con el peligro que todo ello significa. Una parrilla que, de nuevo, como ya ocurriera en Qatar, Austin y Phillip Island será liderada por un vertiginoso Jorge Martín (Ducati, 1.57.790 minutos), que hoy ha roto todos los récords del trazado de Sepang con una vuelta estratosférica.

La sorpresa del día, cómo no, la ha vuelto a protagonizar un espectacular Marc Márquez (Honda, tercero), que teniendo que pasar por la Q1 se ha metido tercero y, a su manera, podrá pelear, tal vez, por las plazas de podio “pese a que en este circuito todo el mundo nos supera por velocidad y debemos buscar rebufos durante todo el rato”. La gesta de MM93 ha sido tan llamativa que hasta él mismo ha reconocido que “no me explico cómo he podido conseguir tan buenos cronos, tanto en la Q1 como en la Q2 pues, sobre todo, en la ‘quali’ definitiva cuando me había pegado a ‘Pecco’ (Bagnaia) y a Jack (Miller) en mis dos intentos, para aprovecharme de su rebufo, van y se caen delante de mío. Pero, bueno, ha salido estupendamente bien, todo”.

Lo de Martín, que sigue con su pulso con el italiano Enea Bastianini (Ducati, segundo en la ‘quali’), no es extraño, pues sigue siendo, tal vez, el piloto de MotoGP más rápido a una vuelta. “Y podía haber mejorado aún más ese crono, pues en un par de curvas podía haber apurado aún más la frenada, pero temía caerme. La verdad es que me siento muy bien, incluso en ritmo de carrera, y mañana tengo una gran oportunidad para poder ganar, por fin, este año”. Martín es de los pocos, por no decir el único piloto de Ducati que se resiste a obedecer las órdenes de no poder atacar mañana al líder del Mundial, ‘Pecco’ Bagnaia. “Si puedo ganar, ganaré, ¡vaya que sí!”

Por lo que hace referencia a los candidatos al título, el desastre ha sido mayúsculo. El líder, Bagnaia, que será campeón mañana si gana y Quartararo no se sube al podio, realizó un excelente primer ‘crono’ en la Q2 y, cuando quiso mejorarlo, se fue incomprensiblemente al suelo, lo que le forzará a salir en novena posición, es decir al final de la tercera fila. El mayor de los Espargaró (Aprilia), incómodo durante todo el fin de semana, solo pudo ser 10º y liderará la cuarta fila, que cerraráel ‘Diablo’, que se cayó en el último entrenamiento de la mañana, se hizo daño en el dedo corazón de su mano izquierda y saldrá 12ª.

Es evidente que la carrera será todo un espectáculo, no tanto porque en ella Bagnaia, Quartararo y Espargaró se juegan, ahora ya sí, sus últimas posibilidades de ‘campeonar’ sino porque la salida la liderarán (y las primeras vueltas, claro) dos pilotos ‘satélites’ de Ducati y un rebelde como Márquez. Martín y Bastianini no son muy amigos de obedecer a Ducati y el ocho veces campeón del mundo quiere ganar en un trazado donde la Honda carece, por completo, de velocidad para afrontar las dos rectas kilométricas de Sepang.