Verstappen culmina un fin de semana pletórico en Austria

'Mad' Max logra su séptima victoria del año y la 42 de su carrera, con lo que adelanta a Ayrton Senna en el ranking histórico de la F1

La FIA acepta una reclamación de Aston Martin y Fernando Alonso sube a la quinta plaza, mientras que Sainz cae a la sexta

Verstappen, perseguido por los Ferrari en el Red Bull Ring

Verstappen, perseguido por los Ferrari en el Red Bull Ring / AFP

Laura López Albiac

Laura López Albiac

Max Verstappen no ha fallado en Austria. Y eso que su equipo, que habitualmente funciona con la precisión de un reloj suizo, le complicó la carrera. Charles Leclerc, que el año pasado le sorprendió en el circuito de Spielberg, sede de Red Bull, intentó repetir el guión, pero esta vez el de Ferrari se encontró con un muro insalvable.

El líder del Mundial, en estado de gracia, se mostró intratable y cosechó su séptima victoria de la temporada, la quinta consecutiva en nueve grandes premios. A sus 25 años ya ha superado a Ayrton Senna en el ranking histórico de la F1 con 42 triunfos. Y vendrán muchos más. Max completó un fin de semana de ensueño, con triunfo también en la carrera sprint del sábado, y 33 puntos más su cuenta en el Mundial (229), elevando 81 la renta sobre su compañero Sergio Pérez.

El mexicano, bajo presión por sus malos resultados en las últimas semanas, culminó una sensacional remontada desde la 15ª plaza de parrilla para finalizar tercero en el podio. Dejó sin recompensa a Carlos Sainz, que terminó frustrado después de certificar las preferencias de Ferrari por Leclerc.

Sainz y el ‘enemigo’ en casa

El madrileño, muy sólido desde los primeros libres del viernes en el Red Bull Ring y tercero en la carrera sprint, empezó tercero este domingo, tras Leclerc, y en las primeras vueltas mostró mejor ritmo que su compañero. Pero desde el muro de la Scudería recibió órdenes tajantes: “Mantente acorde al plan y no ataques ahora". Sainz, que tenía distancia de sobra con Hamilton, a 3 segundos, obedeció. "Debería intentarlo para ir a por Max", insistió. No hubo respuesta.

Ahí empezó a perder el podio. Nico Hülkenberg rompió el motor del Haas y dio paso a un coche de seguridad virtual que Ferrari, a diferencia de Red Bull, que dejó a Max en pista con neumáticos viejos, no dudó en aprovechar. Pero en el doble pit stop, Leclerc tenía prioridad. Sainz entró después y acumuló los segundos perdidos en la parada del monegasco y en la suya, muy lenta. Volvió a pista sexto, dispuesto a recuperar terreno. Pero pagó un alto precio por ir al límite, ya que recibió 5 segundos de penalización, a los que se añadirían otros 10 tras la carrera.

Pérez le dio caza cuando todavía quedaban 13 vueltas y aunque Sainz se defendió con uñas y dientes en una excepcional batalla con el mexicano, al final se impuso la velocidad del Red Bull. En su lucha con Checo, Carlos le hizo un último ‘servicio’ a Leclerc, que afrontó el tramo decisivo de la carrera con suficiente margen para no sufrir ante el de Guadalajara.

"Habrá que analizarlo. Ver qué se podría haber hecho diferente. Pero, claramente, ahora mismo no estoy contento por cómo ha sucedido todo. Cuando te ves con tanto ritmo, ves que estas jugando en equipo y  te comprometen de esta manera... te quedas con una sensación muy amarga", lamentó Sainz. Fred Vasseur, el director de Ferrari, justificó la estrategia: "Antes de la carrera acordamos no atacarnos para poder protegernos del DRS de los de atrás. Nos habría dado igual que estuviera Charles o Carlos delante, habríamos actuado igual", aseguró.

Reclamación de Aston Martin

Para Fernando Alonso fue una carrera mucho más plácida, aunque sin alcientes por el discreto rendimiento de Aston Martin. Después de la ilusionante segunda plaza en Canadá, hace dos semanas, la escudería de Silverstone ha retrocedido claramente en Austria, territorio hostil para Fernando, que en sus diez participaciones en el trazado de Estiria nunca ha logrado pasar del quinto puesto (en 2014, con Ferrari).

En esta ocasión, su balance no fue mejor. Quinto al sprint y sexto ayer. En la salida adelantó a su compañero Lance Stroll y a partir de entonces se mantuvo en la zona intermedia. Hamilton tampoco pudo presentar batalla con un Merdedes que no rindió según lo esperado y Alonso no pudo alcanzar a Lando Norris, que cerró el ‘top cinco’. Aunque luego cambiaron las tornas. Tras la carrera Aston Martin presentó una reclamación por considerar que no se habían aplicado todas las penalizaciones indicadas por exceder límites de pista. La FIA atendió la reclamación del equipo de Alonso y tras repasar la lista de pilotos con más de tres infracciones advirtió que efectivamente algunos debieron ser sancionados. "Estas penalizaciones se verán reflejadas en la clasificación final", anunció la federación. 

Una acertada jugada que permitió a Alonso subir al quinto puesto, con Norris cuarto y el gran damnificado del día, Sainz, cayendo al sexto puesto. El director deportivo de Aston Martin Andy Stevenson decía meses atrás que estaba preparado para este tipo de apelaciones rápidas “Hay que saberse el reglamento al pie de la letra”.

Antes de conocer la decisión, Alonso valoró su fin de semana: “La verdad es que no fuimos demasiado bien y hay que entender el por qué. Siempre esperas un poco más. Sobre todo con la racha que teníamos este año de podios. Aquí nos hemos acercado a Mercedes, pero hemos perdido puntos con Ferrari porque han dado un paso adelante. Habrá altibajos para todos y aquí nos ha tocado a nosotros, pero tenemos una oportunidad de revancha en una semana", subrayó el asturiano en referencia a la carrera del 9 de julio en Silverstone, en casa de Aston Martin.