El protegido de Florentino, señalado por el Bernabéu

El francés Karim Benzema es uno de los jugadores que más ha quedado en evidencia en este arranque de temporada. Su mal momento se suma al de otros muchos jugadores madridistas, aunque ninguno puede presumir como el francés de contar con el apoyo inquebrantable del presidente del Madrid, Florentino Pérez. Señalado por muchos desde que aterrizó en el Bernabéu hace poco más de cuatro años como el protegido del presidente, Benzema está gozando de los privilegios que le concede esa cercanía con el inquilino del palco. Hasta el momento, Carlo Ancelotti, técnico madridista, le ha mantenido contra viento y marea en el once titular, porque así se lo ha exigido Florentino Pérez. El problema es que los silbidos son cada vez más clamorosos en el coliseo blanco y el entrenador italiano se ha quedado sin argumentos para seguir apostando por Benzema y, sobre todo, defendiendo su presencia en el once inicial.

Ancelotti y Florentino Pérez han sido hasta el momento los principales valedores del delantero francés. El presidente madridista ha impuesto su presencia en las alineaciones de la misma forma que ‘aconseja’ al entrenador italiano que incluya en el equipo inicial a los jugadores que han llegado este verano previo desembolso multimillonario, como Bale, Illarramendi o Isco. Y el italiano no ha dudado en complacer a su jefe. Por eso Benzema ha sido titular en todos los partidos oficiales disputados esta temporada.

El francés ha empezado distraído, pese a los dos goles marcados las dos primeras jornadas de Liga y los dos que consiguió en la Champions ante el Galatasaray. La sequía goleadora de las últimas semanas –no ha visto portería desde el pasado 17 de septiembre– y su aparente o real indolencia en el campo le han colocado en el punto de mira de gran parte de la afición madridista y eso se ha reflejado en la actitud de la grada. Ya no le toleran ni un error. Y la mentalidad del delantero se ha visto afectada, como prueba su enfrentamiento con su compañero Pepe en el derbi.

La cuestión se ha convertido en un serio problema para Ancelotti. Debe intentar contentar a Florentino Pérez y también a la afición, algo muy difícil de compaginar en estos momentos.

La presión ambiental es tan fuerte que el entrenador italiano está sopesando dar descanso a Benzema mañana en la Champions, aprovechando que se trata de un rival asequible como el Copenhague, y apostar por Morata. Eso le daría tiempo para intentar recuperar anímicamente al francés, que volvería al once inicial el próximo sábado ante el Levante, lejos de la presión del Bernabéu.