Durísima acta arbitral en el Elche-Osasuna

Denuncia insultos graves y actitud agresiva por parte del Director Deportivo del Osasuna, Braulio Vázquez y del Secretario Tecnico del Club navarro, José Antonio Prieto Castro

Ambos tuvieron que ser identificados por el Cuerpo Nacional de Policia

Imagen del duelo entre Elche y Osasuna

Imagen del duelo entre Elche y Osasuna / EFE

Ramón Fuentes

Ramón Fuentes

El final del encuentro entre el Elche y Osasuna, donde el equipo navarro ha acabado muy molesto con la actuación arbitral, ha quedado patente en el interior de los vestuarios. Basta con ver la redacción del acta arbitral de Ricardo de Burgos Bengoechea que en la parte de ampliaciones hace constar un graves incidentes con el Director Deportivo del club navarro, Braulio Vázquez y posteriormente con el Secretario Técnico del Osasuna. Respecto al primero dice textualmente que: "Otras incidencias: Al finalizar el encuentro, encontrándonos en el túnel de vestuarios, D. Braulio Jesús Vázquez Benites con DNI 32810761L, siendo éste Director Deportivo del Club Atlético Osasuna, se dirige al equipo arbitral gritando y con actitud agresiva en los siguientes términos: "esto es una puta vergüenza; nos vamos a segunda" teniendo que ser sujetado por miembros de su club y por las fuerzas del orden público, golpeando posteriormente con ambas manos la pared del túnel de vestuario". 

Y luego viene la parte dedicada al Secretario Técnico, José Antonio Prieto, que el colegiado internacional vasco redacta de esta manera: "Acto seguido, y encontrándonos en la misma zona, D. José Antonio Prieto Castro con DNI 32663725E, siendo éste Secretario Técnico del Club Atlético Osasuna se dirige al equipo arbitral gritando y en actitud agresiva, teniendo que ser sujetado por miembros de su club y las fuerzas del orden público. Cuando estaba siendo retirado del túnel de vestuarios, golpeó con el puño un dispensador de gel, rompiéndolo y provocando un enfrentamiento con personal del club local por lo que tuvo que ser dirigido a su vestuario por la policía presente en el túnel. Ambos directivos tuvieron que ser identificados por miembros del CNP. "

Veremos ahora las consecuencias disciplinarias para ambos directivos del club. Si se llegara a considerar como muy grave podría comportar una multa de entre 3000 hasta 30005 euros y, al ser la primera vez, comporta una amonestación pública. Si bien el artículo habla de la opción incluso de la posibilidad de privarle de la licencia entre dos a cinco años según fija el artículo 68 relativo a las conductas contrarias al buen orden deportivo. En caso de ser considerada como grave, 

Si se consideran como graves supondría la multa de hasta 3.006 euros, inhabilitación o suspensión por tiempo de un mes a dos años o de al menos cuatro encuentros. De hecho las amenazas al arbitro se sancionan como graves y con una horquilla entre cuatro y doce partidos. Veremos qué resolución adopta el Comité de Competición.