Lewandowski se da un festín mientras espera a Messi y Ronaldo

Sentado en su propia mesa, el polaco anotó un hat trick y ya es el máximo goleador en solitario de las 5 grandes ligas

Leo Messi, segundo clasificado en la lucha por la bota de oro el año pasado, podría debutar este domingo con el PSG

Lewandowski celebrando el gol que abría la lata ante el Colonia

Lewandowski celebrando el gol que abría la lata ante el Colonia / Twitter @FCBayern

Sergi Graell

Sergi Graell

Hay cosas que no cambian. La temporada pasada, Lewandowski se coronó con la bota de oro tras ser el futbolista más determinante del planeta, con diferencia, tras anotar 41 goles en la Bundesliga, 11 más que Leo Messi en LaLiga y 12 por encima de Cristiano. Hace un tiempo, Griezmann empezó a hablar de las mesas, esas donde comen las estrellas, y el polaco, se apuntó: "Ahora ya puedo invitar a Messi y Cristiano a mi mesa", dijo en mayo con el galardón ya en su poder.

No le han vuelto a preguntar por ello, pero después del festín de goles en este inicio de campaña, ya vuelve a comer solo. El delantero del Bayern, próximo rival del Barça en Champions, ha visto portería en los tres primeros encuentros del campeonato liguero alemán, sumando así un nuevo récord al enlazar siete temporadas seguidas marcando en el partido inaugural. A este registro se le tiene que añadir un hat trick en la última fecha. En total ya son 5 (más dos que marcó en la Supercopa Alemana).

Nadie le pisa los talones. Lewandowski va como un cohete hacia la reválida, pero antes queda por ver la puesta en escena de Leo Messi en su nuevo club y su nuevo territorio. El astro argentino ha entrado en su primera convocatoria y, junto a Mbappé y Neymar, tratará de seguir dándole caza. El curso anterior fue el que más se le acercó y ahora, ante lo que podría ser su última oportunidad de conseguir su séptima Bota de oro, no hay ninguna duda de que se lo peleará.

Más complicado lo tiene Cristiano en su regreso a casa. La exigencia de la Premier League puede ser un factor que le haga bajar sus registros, aunque con el United, en la 2007-08, ya se la llevó con 31 goles. 12 años más tarde, volverá a vestirse de rojo en su enésima muestra de que puede seguir comiendo en una mesa aparte.