¿Por qué Messi (y Cristiano Ronaldo) es ahora aún mejor?

Ronaldinho, por ser el ejemplo más próximo, pero muchos otros jugadores antes y después del brasileño, nos han demostrado que pueden alcanzar la cima del fútbol, pero que les resulta complicado permanecer allí cuando desaparece la motivación o el deseo de ganar. No es fácil mantenerse en lo más alto siempre, algo que solo logran deportistas señalados, especiales, únicos. Los hay en todos los deportes, y en el fútbol también.

Cristiano Ronaldo: "Jugaré hasta que mis piernas digan 'Cristiano, se ha acabado'

Este mes de octubre se entrega el Balon de oro y, por primera vez en la historia, se le dará probablemente a un jugador que no milita en ningún equipo europeo. Jamás había pasado. Y ocurrirá con Leo Messi. Lo logrará por su triunfo en el Mundial, pero también por ser capaz de aumentar su aura en una competición que se ha apodado como menor, como la MLS.

Sea menor o no, como el caso de Arabia Saudí para Cristiano Ronaldo, otro monstruo del deporte, no es nada fácil decidir que tu carrera al alto nivel ha acabado y no bajar los brazos, como han hecho ellos dos. Emigraron de Europa donde se han coronado para irse a competiciones sin tanta historia y no lo viven como un retiro dorado sino como una oportunidad para seguir creciendo como jugador. Esto los hace enormes. Es el caso de estos dos animales que por primera vez en muchos años ya no juegan la Champions y su ambición no ha desaparecido ni un ápice. Hay que ver los datos para darse cuenta de esto. 

Dos casos

Empecemos por Cristiano Ronaldo, el primero en irse de Europa. En los últimos 13 partidos en Arabia Saudí ha marcado 15 goles y ha dado 5 asistencias. Y ha sido clave para que su equipo, el Al Nassr, lograra conquistar la Liga de Campeones de Arabia. Cristiano, con sus actuaciones en el Oriente Medio, no vive una decadencia sino que engrandece todavía más su enorme palmarés y sobre todo su nombre, su prestigio, como deportista porque el paso de Europa a Arabia no le ha hecho cambiar. Sigue dándolo todo como si fuera el último partido de su carrera. Veremos si otros que se han ido a Arabia llamados por el dinero mantienen el nivel deportivo. Habrá pocos. Veréis.

En el otro lado del charco está Leo Messi, que se fue de París, no encajó en el Barcelona y decidió irse a Miami, un equipo sin ninguna tradición, último en la clasificación y sin ningún título en su palmarés.Desde que llegó, Leo Messi lleva 13 partidos disputados y ha marcado 12 goles, ha dado 5 asistencias. Con él, el Inter ha ganado todos los partidos que ha disputado y esta semana (miércoles) puede ganar su primer trofeo, la US Open Cup.

Todo lo que no se vio de la celebración del primer título de Messi en Miami

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Algunos podrían decir eso tan fácil que “bueno, es que ganan andando estos”. No me lo creo. En ningún deporte se gana de forma continuada andando, menospreciando al rival o yendo a un 30%, un 50% o un 80% de tus posibilidades. Y esto es lo más complicado y el mejor elogio para estos dos animales que escribieron las páginas más bellas del fútbol europeo durante años y que ahora siguen engrandeciendo su figura en otros lares con la misma ilusión que tenían, con el mismo amor por este deporte y por la victoria. Por todo ello, tienen mi aplauso.