Reflexiones futbolísticas a raíz de Maspalomas

La edición número 27 del torneo internacional de fútbol-7 La Liga FCFutures se clausuró con un éxito de emoción, espectáculo y deportividad.

Además del triunfo del Atlético de Madrid, el torneo de Maspalomas nos deja otras lecturas en clave Barça y fútbol español a tener en cuenta

Las 10 perlas que más han brillado en Maspalomas

Euforia en el Atlético después de conquistar Maspalomas

Euforia en el Atlético después de conquistar Maspalomas / La Liga FC Futures

Jaume Marcet

Jaume Marcet

"Lo que más recuerdan los jugadores de su etapa en la cantera son estos torneos" Era la reflexión de un miembro del cuerpo técnico de uno de los equipos participantes en La Liga FCFutures. Este tipo de competición representa una experiencia única a todos los niveles para los niños que tienen la suerte de participar.

Lo viven siempre de manera intensa, pero con el paso de los años lo recuerdan con mucho cariño. Más allá de este aspecto y de la magnífica organización de La Liga y la Fundación José Ramón De la Morena, el torneo de Maspalomas me deja algunas reflexiones sobre la cantera y nuestro fútbol que vale la pena exponer.

1. EL MODELO MASIA FUNCIONA

En una lectura resultadista, el torneo no fue positivo para el Barça porque cayó en los cuartos de final. Aún y así hay que tener en cuenta que los de Jordi Poma ganaron dos partidos y empataron contra el que sería el campeón y solo los penaltis lo apearon del torneo.

Pero este aspecto es, en realidad, secundario. El Infantil B del Barça mostró personalidad y un estilo de juego siempre reconocible. El equipo nunca especuló y mereció llegar más lejos. Además, se pudo comprobar el altísimo nivel individual de los jugadores y un comportamiento dentro y fuera de los terrenos de juego ejemplar. El Barça es de los pocos equipos que renuncia a seleccionar el equipo más competitivo porque prioriza que todos los jugadores puedan disfrutar de esta experiencia sin excluir a nadie.

Maspalomas Keita, en Maspalomas

Maspalomas Keita, en Maspalomas / La Liga FC Futures

2. COMPETIR NO LO ES TODO

En el fútbol profesional se tiene asumido que competir y ganar es lo más importante, pero este concepto es muy peligroso trasladarlo al fútbol base. Sería discutible si hablásemos de juveniles, pero en chicos que inician su etapa de infantil no se puede centrar todo en la competición. Los equipos acuden a estos torneos con una mentalidad excesivamente profesional y resultadista y se percibe un miedo exagerado a perder que paraliza la creatividad.

El fútbol alevín e infantil se parece cada vez más al de la élite, siendo un hecho aceptado que la táctica más importante que la técnica y este no es el mejor camino para formar futbolistas que disfruten de su profesión y que jueguen con alegría y atrevimiento.

El Atlético, campeón en Maspalomas

El Atlético, campeón en Maspalomas / La Liga FC Futures

En el fútbol, el factor competitivo es inherente en todas las edades, pero tiene que ser algo más progresivo que se vaya adquiriendo con el paso de los años. A los 12 años no toca intentar ganar como sea, toca disfrutar y jugar con un sentido mucho más lúdico.

3. LAS CANTERAS ESPAÑOLAS, MUY SUPERIORES

Los equipos internacionales invitados al torneo han demostrado un nivel técnico y colectivo muy inferior a la de los conjuntos españoles. No es solo la vertiente competitiva, el nivel técnico de los canteranos españoles es muy superior. Hay una razón principal que explica este fenómeno. En España se le da mucha importancia a la captación y en las canteras españolas se cuida con mimo este aspecto desde edades más tempranas.

No es una cuestión de que los equipos españoles compitan mejor, ya que ni el Liverpool, Dortmund, Juve u OM mostraron ningún detalle de talento o ingenio que se pudiera equiparar con los equipos de nuestro país.

El infantil de la Juventus en Maspalomas

El infantil de la Juventus en Maspalomas / La Liga FC Futures

4. EL REGATE, UNA ESPECIALIDAD A REIVINDICAR

El tópico de que el regateador es una especie en extinción en el fútbol actual podría discutirse, pero observando todos los partidos de este torneo, la acción de driblar es prácticamente inexistente. El miedo a perder paraliza, pero también hay un exceso de juego académico que no promociona el atrevimiento para arriesgar. En estas edades el chico de talento tiene que mostrar sius cualidades sin miedo a perder el balón.

Unax Hernández en Maspalomas

Unax Hernández en Maspalomas / La Liga FC Futures

5. EL FACTOR FÍSICO MARCA LAS DIFERENCIAS

El fútbol-7 es un formato espectacular en edades benjamines y alevines, pero cuando los chicos empiezan a desarrollarse el campo se les queda corto y el físico es un factor que distorsiona en exceso el análisis del potencial de los jugadores. Al cumplir los 12 años se nota en exceso la diferencia entre los niños que se desarrollan precozmente y los que lo hacen de forma tardía. En etapas benjamines y alevines, las diferencias son menores y el talento se impone.

David García rompe con el molde de jugadores potentes del infantil del RM en Maspalomas

David García rompe con el molde de jugadores potentes del infantil del RM en Maspalomas / La Liga FC Futures

6. LAS CONTRADICCIONES DE LA FÁBRICA

El Real Madrid mereció ganar el torneo porque jugó mejor y generó más ocasiones que el Atlético en la final. Además, contó con dos futbolistas fabulosos, el zurdo Alberto Ruiz y el pequeño David García. Pero, al final no ganaron y creció entre la expedición blanca un sentimiento de frustración exagerado. Marcarse como único objetivo el ganar en edades formativas puede ser contraproducente. El Real Madrid volvió a demostrar que dispone de talentos con nivel para llegar a su primer equipo, pero con técnicos como Ancelotti poco proclives a atreverse con los canteranos lo tendrán más complicado. Guardiola ya lo dijo hace muchos años, La Masia es muy buena, pero la diferencia es que nosotros los ponemos.

Alberto Ruiz fue el MVP de Maspalomas

Alberto Ruiz fue el MVP de Maspalomas / La Liga FC Futures

7. ARBITRAR ASÍ ES UNA DELICIA

Mateu Lahoz disfrutó como pocas veces en su carrera. Y no solo él, todos los árbitros vivieron una experiencia maravillosa en Maspalomas. Dirigir un partido en el que los jugadores no protestan, no fingen, no intentan engañar al árbitro, no pierden tiempo y aceptan todas las decisiones del colegiado sin rechistar es una bendición para el fútbol. Por un día, los profesionales tendrían que fijarse en los niños y aprender de su naturalidad y deportividad.

Mateu Lahoz arbitró la final de Maspalomas

Mateu Lahoz arbitró la final de Maspalomas / La Liga FC Futures

Al final, ganarían y perderían los mismos pero todos saldríamos reforzados porque el espectáculo y el ambiente que rodea al fútbol sería más sano y amable.