El argumento que tiene preparado Dani Alves para su defensa el próximo lunes

El exjugador del Barcelona ha insistido en volver a dar una nueva versión de los hechos

El brasileiro se enfrenta a una acusación de violación a una joven en la discoteca Sutton

Dani Alves con la selección brasileña

Dani Alves con la selección brasileña / EFE

Dani Alves, exjugador del Barça, se encuentra en prisión preventiva tras una acusación de violación a una joven de 23 años en la discoteca Sutton de Barcelona el pasado 31 de diciembre. Después de varias versiones, el futbolista volverá a declarar.

Según ha avanzado la cadena SER, el futbolista volverá a prestar declaración de forma presencial ante la jueza que instruye el caso. Su abogado, Cristóbal Martell, ya ha solicitado la nueva declaración para su cliente y sostiene que las relaciones fueron consentidas.

La cita tendrá lugar este lunes, 17 de abril, en la sección de la Tercera de Audiencia de Barcelona. En anteriores declaraciones, el brasileiro había ofrecido hasta tres versiones diferentes ante la jueza instructora. En un primer momento afirmó que no conocía a la joven, después reconoció que le había practicado una felación, ahora defenderá que la chica entro en el baño de mutuo acuerdo y enseñará las conversaciones de Whats App de su amigo.

Dani Alves ha pedido volver a declarar a petición propia, tal como establece la ley, que permite a una persona investigada poder declarar cuantas veces considere oportunas durante su proceso judicial.

El exjugador del Barça permanece ingresado en el centro penitenciario de Brians 2 en Sant Esteve Sesrovieres (Barcelona) desde el pasado 20 de enero, después de que la jueza lo enviara a prisión de manera preventiva y sin fianza.

Esta podría ser la última vez que Dani Alves tenga la oportunidad de dar su versión, aunque la investigación continúa abierta por el momento, se cerrará muy pronto. Todo apunta a que el futbolista se sentará en el banquillo de los acusados ante los cargos de violación, de ser declarado culpable se enfrentaría a una pena entre 8 y 10 años de cárcel.