Pensar en más o bajar la persiana

Después de una semana movida en la que los aspectos extradeportivos se han comido toda la actualidad espanyolista, el Alavés ya está aquí. Tras vencer al Girona y dejar encarrilada la salvación, el duelo ante los de Abelardo marcará a lo que aspira el Espanyol en las últimas siete jornadas. Restan 21 puntos en juego y los de Rubi se encuentran a ocho puntos de la sexta plaza, siete de una séptima que precisamente ocupan los babazorros y que puede dar acceso a la Europa League siempre dependiendo del ganador de la Copa del Rey.

Se trata de una distancia que puede ser recortable con un buen final liguero, pero para ello hay que vencer al Alavés. No hacerlo significaría ver alejarse demasiado la opción continental y el Espanyol volvería a vivir un final de campeonato sin nada en juego. Como en la mayoría de las últimas diez campañas, en las que únicamente en la 2014-15 el equipo tuvo opciones hasta la última jornada, con Sergio González en el banquillo, de clasificarse para Europa. 

DOBLE OBJETIVO

“Si ganamos al Alavés podremos acercarnos un poquito a los puestos de arriba”, declaró Rubi tras la victoria del pasado sábado en Montilivi. El preparador perico es consciente de que venciendo al cuadro vitoriano la afición y el equipo se volverán a ilusionar, reenganchándose a una lucha que se le resiste al Espanyol. Y no solo eso, sino que se sumarían 41 puntos y la permanencia ya estaría en el saco.

Pero todas estas cábalas pasan por sumar los tres puntos frente a los vascos. Si se consigue, el Espanyol sumaría su segundo triunfo consecutivo, algo que no logra desde el pasado mes de octubre, cuando se ganó de manera consecutiva a Villarreal (3-1) y Huesca (0-2). Es más, hasta ahora esa es la única vez en la que se ha logrado esta campaña. 

Para lograrlo, es vital seguir con la solidez defensiva mostrada en las últimas jornadas y, sobre todo, mejorar en ataque. El equipo solo ha marcado más de un gol en dos de las últimas ocho jornadas y su delantero referencia, Borja Iglesias, solo ha visto puerta tres veces en las últimas 12. El ‘Panda’ no se encuentra en su mejor forma cara a puerta y el Espanyol lo hecha en falta.

NALDO ESTARÁ

O al menos debería, puesto que tras unas molestias en la rodilla izquierda, en los últimos días se ha ido reintegrando al trabajo grupal. El brasileño volverá a formar pareja en el eje de la zaga junto a Mario Hermoso, con Óscar Duarte en el banquillo y sin Lluís López, que debe cumplir sanción puesto que vio su quinta amonestación el pasado domingo en el duelo entre el filial blanquiazul y el Villarreal B. El canterano ya no jugó ante el Girona, al ser uno de los descartados por Rubi junto a Hernán Pérez.

En lo que respecta al resto de jugadores que se encuentran en la enfermería, Facundo Ferreyra ya realiza ejercicios sobre el césped, mientras que David López y Pablo Piatti siguen con sus respectivas recuperaciones.