FC Barcelona-Real Madrid: La realidad que viene

La trilogía de clásicos que finalizará el próximo miércoles 5 de abril completará una de las temporadas con más enfrentamientos entre los dos ‘gigantes’ del fútbol español. Entre el amistoso de Las Vegas y la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey, ambos compromisos incluidos, FC Barcelona y Real Madrid se habrán visto las caras en seis ocasiones. Es la cifra más elevada de duelos directos entre culés y merengues en lo que llevamos de siglo… y un pequeño ‘spoiler’ de la realidad que está por venir. Del futuro que anhelan catalanes y madrileños. El proyecto de la Superliga que están liderando Florentino Pérez y Joan Laporta y los intereses compartidos por los dos clubes, que han entendido que a nivel financiero son más fuertes cuando están juntos, ‘empuja’ a la eterna rivalidad hacia una nueva normalidad. Los pequeños rifirrafes por el ‘caso Negreira’ no deberían cambiar nada.

El cambio de tendencia, de hecho, ya ha empezado. En 14 de las últimas 23 temporadas solo se han disputado los dos clásicos de Liga, pero desde 2017 esto solo ha sucedido en dos ocasiones (los cursos 2019/20 y 2020/21). Precisamente en verano de ese mismo año, Barça y Madrid organizaron en Miami el segundo amistoso en el extranjero de la historia entre ellos. El primero había tenido lugar en Barquisimeto (Venezuela) en 1982, casi cuatro décadas atrás. Solo tuvo que pasar un lustro, sin embargo, para que los dos equipos más importantes de Primera se pusieran nuevamente de acuerdo para coincidir en pretemporada, en este caso en Las Vegas. Y eso que hubo una pandemia de por medio que lo paralizó todo y, claro está, impidió a los clubes la realización de giras internacionales.

El formato de la Superliga

A juzgar por el éxito del compromiso de Nevada, es evidente que los departamentos comerciales barcelonistas y merengues continuarán ‘explotando’ esta vía de ingresos. Más si cabe teniendo en cuenta que, al ir de la mano en el impulso de la Superliga, la relación entre las dos entidades pasa por un buen momento a nivel histórico. Además, el propio formato de la revolucionaria competición que proponen el FC Barcelona y el Real Madrid –que establecería un mínimo de 14 encuentros por participante cada campaña y aumentaría considerablemente las posibilidades de disfrutar de más clásicos, puesto que los finalistas de la actual Champions solo juegan 13 partidos– también ‘rema’ hacia la misma dirección. Aunque la Copa a partido único antes de semifinales puede ir en contra de la propensión, la configuración de ‘final four’ de la Supercopa lo compensa.

Sexta trilogía de la historia

La resolución de la eliminatoria de Copa será la tercera entrega de la séptima tríada de la historia de los clásicos. Barça y Madrid se han enfrentado tres veces en un margen temporal de 35 días. En 2011 se disputaron cuatro duelos en 18 días (una victoria blanca, un empate y una eliminatoria de Champions favorable a los azulgranas), un récord a día de hoy. En los años 80 se celebraron dos series más de tres encuentros (pleno de victorias merengues en la temporada 1988/89 y de éxitos culés en el curso 1982/83). A finales de 1960, los catalanes tumbaron a los madrileños en la Copa de Europa y los segundos se vengaron en Liga. El primer precedente fue en 1916, con un ‘póker’ obligado: se necesitaron dos duelos de desempate que acabaron decantando la balanza a favor de los intereses madridistas.

El clásico traspasa fronteras

Por primera vez, esta temporada se han disputado dos clásicos lejos del territorio español: uno, amistoso, en Estados Unidos y otro, oficial, en Arabia Saudí. La tendencia es que siga siendo así. De hecho, los departamentos comerciales del Barça y el Madrid ya han iniciado las conversaciones para organizar un nuevo compromiso de pretemporada en territorio americano. Aún no hay nada definido ni asegurado al 100%, pero la intención de los dos equipos más importantes del fútbol español es dar continuidad a los amistosos en el extranjero. Y no solo con un objetivo económico: tanto azulgranas como merengues tienen mucha afición en otros países y este tipo de iniciativas les ayudan a ‘extender’ la marca.