Tuchel sacó el Joker y destrozó el sueño de Arteta

El Arsenal pagó cara la falta de experiencia para despedirse de la Champions ante un Bayern que impuso su jerarquía (1-0)

El Bayern muestra su grandeza en la Champions

Tuchel, durante el duelo ante el Arsenal

Tuchel, durante el duelo ante el Arsenal / EFE

Àlex Calaff

Àlex Calaff

El aspecto mental iba a ser determinante. El peor Bayern de los últimos años llegaba al duelo contra el Arsenal completamente derrotado en Alemania, dependiendo de su desempeño en la Champions para salvar una temporada para olvidar. Los 'Gunners', por su parte, encaraban el duelo metidos de lleno en la pelea por la Premier y tras una buena ida en el Emirates, con la inmensa ilusión de hacer buenos esos 14 años de espera para estar en unos cuartos de la competición reina y colarse entre los cuatro mejores equipos de Europa. Sin embargo, los bávaros tenían a su favor la experiencia de competir en escenarios como estos casi cada año.

Ya lo dicen. Más sabe el diablo por viejo que por diablo. Y la Champions puso en su lugar a los de Mikel Arteta, con la dura (pero necesaria) enseñanza de que la jerarquía, el oficio y la experiencia también suman muchos puntos en una competición bastante cruel. "No estábamos aquí hace 14 años y es por algo. Queremos hacerlo todo rápido, avanzar al siguiente nivel lo antes posible. Creo que teníamos nivel para estar en semifinales. Pero aún nos faltan cosas", declaró el español tras caer por 1-0 y quedar eliminados.

En el Allianz, Tuchel le ganó la partida en el aspecto táctico. Por lo menos, fue capaz de secar por completo a Bukayo Saka, que tanto daño hizo en la ida (2-2). El inglés, que marcó en el Emirates, no pudo aparecer en el partido de vuelta. No disparó. No creó ninguna ocasión. No completó ningún regate. No consiguió firmar ningún centro con éxito. Totalmente anulado por el planteamiento del alemán.

EL ANTÍDOTO PARA EL VENENO DE SAKA

Con Alphonso Davies suspendido, solo quedaban dos opciones para el lateral izquierdo: Noussair Mazraoui o Raphaël Guerreiro. Sin embargo, Tuchel optó por alinear a los dos. El marroquí de lateral y el portugués, que está acostumbrado a jugar también en posiciones más adelantadas (lo solía hacer en el Borussia Dortmund), de extremo. Tras el partido, Tuchel desveló el evidente motivo de su decisión: frenar a Saka.

Mazraoui y Guerreiro, los encargados de frenar a Saka

Mazraoui y Guerreiro, los encargados de frenar a Saka / EFE

“Contra este equipo estás obligado a defender mucho en ese sector. La banda derecha del Arsenal es por la que normalmente empiezan los ataques. Es una banda peligrosa. Por eso elegimos a Rapha [Guerreiro]. No es el rol de Thomas [Müller] ser lateral izquierdo. Rapha sí”, confirmó Tuchel, que consiguió el billete a las semifinales en gran parte a este movimiento.

LOS ERRORES SE PAGAN

El Bayern salió a comerse a los de Arteta desde el inicio, con un Allianz Arena que encendió el partido y apretó para dar ese empujón tan necesario tras una temporada horrible. A estas alturas, nada vale más en la Champions que encajar bien los golpes, no cometer errores graves y ser terriblemente eficaz y aprovechar las oportunidades que uno tiene. Antes del descanso, un doble palo de Goretzka y después Guerreiro, dejó con vida a un Arsenal que más tarde cometería errores que se pagan demasiado caros en la competición reina.

En el minuto 56, la falta de comunicación entre Raya, a media salida de la portería, y Gabriel, que desvió el balón y por poco no se lo introdujo en su propia meta, empezó a dibujar el triste desenlace del partido. Poco después, en el minuto 64, llegaría el drama. Un centro de Guerreiro al segundo palo encontró la cabeza de un Kimmich que remató ante la dormida mirada de Rice, Tomiyasu y Martinelli. Ninguno de los tres fue capaz de conectarse para evitar que el alemán rematase totalmente cómodo.

Kimmich, autor del gol del Bayern

Kimmich, autor del gol del Bayern / EFE

Dicen que la Champions League te lleva a situaciones nuevas, que no enfrentas en la competición doméstica. Eso lo vivió en primera persona un Arsenal que notó la falta de experiencia. Seguramente, en la Premier League no habría encajado alguno de los tres goles que recibió en la eliminatoria contra el Bayern. Pero de todo se aprende. En Inglaterra tienen un inmejorable espejo de lo difícil que es triunfar en Europa. Al Manchester City le costó años y varias decepciones poder besar la gloria en Estambul el año pasado.

"LES HA FALTADO ALGO DE EXPERIENCIA"

"Son un equipo élite. Sé que seguramente sea algo que no quiere escuchar Mikel ahora, pero si ves los partidos del Arsenal son regulares, divertidos de ver y siempre dejan algo para aprender. Puede que les haya faltado algo de experiencia en partidos así", apuntó Tuchel tras el duelo. Y no son palabras para quedar bien. El Bayern impuso su jerarquía y merecidamente estará en las semifinales contra el Real Madrid.

Al Arsenal no le queda otra que sacar todo el orgullo posible para pelear la Premier League hasta al final y no puede dejar pasar un solo día para volver a levantarse. Mikel Arteta creyó en este equipo hasta el final. ¿Por qué no hacerlo el año que viene? Él, que vivió noches muy duras al lado de Pep Guardiola en el Manchester City, sabe que, en la vida, todo llega.