Anulada la sanción a Muntari tras ser víctima de insultos racistas

La Federación Italiana de Fútbol (FIGC) anuló la sanción de un partido que había impuesto al centrocampista ghanés del Pescara Sulley Muntari por irse del campo del Cagliari en pleno partido a causa de los insultos racistas que recibió por parte de un sector del público.

Muntari fue amonestado por el árbitro del encuentro, después de dirigirse a él para avisarle de las ofensas racistas que estaba recibiendo. Tras ver la amarilla, el jugador decidió abandonar el partido en señal de protesta, motivo por el cual fue amonestado de nuevo.

Muntari fue sancionado con un partido de suspensión por esa doble cartulina, primero "por protestar al árbitro", y luego "por su comportamiento antirreglamentario, al abandonar el terreno de juego sin autorización". El castigo no tuvo inicialmente en cuenta las razones del malestar del centrocampista.

Este viernes, la comisión de apelación de la FIGC rectificó, al entender que el caso es "especialmente sensible". Muntari, por tanto, podrá jugar este domingo ante el Crotone.

La FIGC decidió no sancionar al Cagliari al interpretar que los insultos racistas fueron proferidos por "unos diez aficionados, menos del 1% de los que ocuparon ese sector" del estadio.